A punto de ser destruidas ruinas romanas en Mérida
Han aparecido en Mérida los restos de una construcción de un posible edificio público del foro municipal de la antigua Augusta Emérita, como consecuencia del derribo de unas casas en el centro de la ciudad. Las ruinas han estado a punto de ser destruidas por las máquinas que realizaban los trabajos de cimentación de un nuevo edificio.A pesar del conocimiento de que en el centro de la ciudad de Mérida se encuentra el foro de la antigua urbe romana, no se ha establecido ningún tipo de normas para la protección de los restos arqueológicos que sin duda existen en ella.
La única solución que garantizaría la conservación del foro emeritense es la expropiación de las fincas afectadas, en estos momentos inviable por motivos económicos.
Mientras tanto la Asociación para la Defensa de la Naturaleza y de los recursos de Extremadura (Adenex) propone que el Ministerio de Cultura cree un equipo de arqueólogos que inspeccione cualquier obra a realizar, con el fin de que no se destruyan las ruinas romanas, favoreciendo así la conservación de nuestro patrimonio histórico-artístico.
Alquiler de la Cartuja de Jerez
Veinte duros al año pagará la comunidad de monjes cartujos de la orden de san Bruno a la Administración por el uso, para el cumplimiento de sus fines religiosos, de la Cartuja de Jerez, monumento nacional propiedad del Estado, informa Efe.
Sin embargo, la Asociación Cultural de los Montes de Toledo pagará mil pesetas por utilizar dos de las tres plantas de la Puerta del Cambrón, que se encuentra dentro del recinto amurallado de Toledo.
La cesión de la cartuja a los monjes, que ha autorizado, al igual que la de la Puerta del Cambón, el Ministerio de Cultura mediante dos órdenes que han sido publicadas en el Boletín Oficial del Estado de ayer, lo es por un período de 99 años, y el canon de veinte duros será revisado cada dos años de acuerdo con las variaciones ole los índices del coste de la vida.
La de la Puerta del Cambrón lo es sólo por cinco años, si bien la cesión se podrá renovar por plazos iguales, automáticamente, salvo decisión contraria de una de las partes. El canon de mil pesetas también se revisará en este caso cada dos años, de acuerdo con los índices del coste de la vida.
Babelia
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