Joven hallado muerto en su casa con un tiro en la cabeza

Un joven de dieciocho años de edad, Miguel Angel Díaz Sabater, fue hallado muerto por su padre, con un tiro en la cabeza, sobre las dos de la madrugada de ayer en el sótano del domicilio familiar, situado en la localidad de Yecla (Murcia). Las circunstancias de la muerte permanecen muy oscuras, ya que en el lugar donde fue encontrado el cadáver no aparecieron ni casquillos de bala ni arma alguna con la que se hubiera efectuado el disparo.

El padre del joven fallecido, Miguel Díaz Marco, es presidente de la Federación Local de Tiro Olímpico de Yecla. Tanto el padre como el hijo practicaban el tiro y habían participado con éxito en campeonatos provinciales y nacionales. El sótano del domicilio estaba acondicionado para las prácticas de tiro y era su lugar habitual de entrenamiento. Miguel Díaz es además dirigente local de Falange Española de las JONS, si bien no hay indicios que hagan pensar en que la muerte de su hijo haya tenido motivaciones políticas.

Las armas que poseía la familia se encontraban en un armero cerrado con llave cuando fue hallado el cadáver y ninguna presentaba indicios de haber sido disparada recientemente. Se están practicando las correspondientes diligencias judiciales y hoy se efectuará la autopsia, que quizá arroje alguna luz sobre las circunstancias de la muerte.

Expertos policiales

Dos expertos en balística del Cuerpo Superior de Policía llegaron ayer, sobre las diez de la mañana, a Yecla por llevar a cabo una investigación.Algunas fuentes han indicado que el orificio que presentaba el cadáver podría haber sido provocado por un proyectil del calibre 22, que es el utilizado en tiro deportivo, si bien fuentes policiales consultadas por EL PAÍS señalaron que esto es difícil de precisar hasta que se conozca el resultado de la autopsia.

Lo que sí parece más seguro es que se trate de un homicidio. La hipótesis de suicidio, de la que se habló en un principio, estaría descartada al no haberse hallado arma ni casquillo junto al cadáver.

El joven fallecido cursaba estudios de primer curso de Arquitectura en la Universidad de Valencia y se encontraba en su casa de vacaciones.

Descubrimiento del cadáver

Al parecer, la tarde del martes los padres de Miguel Angel Díaz salieron de casa sobre las siete de la tarde para oír misa, quedando el joven en casa. Al regresar a las nueve de la noche se encontraron la puerta cerrada con llave y no vieron a su hijo, por lo que pensaron que se habría marchado. Le estuvieron esperando hasta las dos de la madrugada, momento en que decidieron ir a acostarse. Al revisar el padre las diversas puertas de la casa para comprobar que estaban cerradas, encontró el cadáver en el sótano.Una fuente de la localidad consultada por este periódico manifestó que era frecuente que Miguel Angel se reuniese en el sótano de su casa con amigos para practicar el tiro.