Médicos zaragozanos diagnostican parálisis a una afectada por el envenenamiento masivo

Dolores Crespo, de 32 años, natural de Burgos y hospitalizada desde hace más de un mes en una clínica zaragozana, sufre parálisis de las extremidades inferiores, según los médicos que la atienden. La Asociación de Afectados por el Envenenamiento de Aceite, de Leganés (Madrid), informa también que María Gómez, domiciliada en Getafe, debe hacer uso de una silla de ruedas por parálisis de piernas. Por otra parte, en el último Consejo de Ministros se decidió la creación de un programa nacional de atención y seguimiento de afectados

Los médicos que atienden a Dolores Crespo en Zaragoza sostienen que su parálisis será probablemente irreversible, según recoge Europa Press. Anteriormente, a la enferma le habían diagnosticado en su provincia. nota¡ dolencia cardíaca, gripe y tuberculosis. El caso de la otra enferma, María Gómez, es el tercero de parálisis que denuncian entre sus afiliados la asociación de afectados con sede en Leganés.La Asociación de Afectados por el Envenenamiento de Aceite, que cuenta actualmente con 2.500 miembros, y a la que han seguido otras localidades de la periferia de Madrid (Parla, Alcalá de Henares, Villaviciosa de Odón y Alcobendas) ha solicitado, en una reciente conferencia de Prensa, la habilitación por parte del Gobierno de un fondo de ayuda «no menor de 15.000 millones de pesetas». Consideran que «estamos sumidos en un grave caos que no se arregla con la sola creación de una secretaría de Estado».

Por su parte, los referidos afectados están preparando la organización de un servicio de asistencia social para todas aquellas personas que no pueden desempeñar las tareas del hogar a causa de la intoxicación. Asimismo, «trataremos de que oficialmente se arbitren medidas para solucionar la falta de escolarización del centenar de niños enfermos», dicen. A fin de conseguir fondos para los afectados a más corto plazo, planean la celebración de festivales benéficos.

«Nos sentimos consumidores defraudados y envenenados», añaden los miembros de la citada asociación, quienes en un manifiesto dirigido a la opinión pública piden «la publicación urgente de un código alimentario con fuerza de ley, que nos proteja eficazmente de los fraudes futuros, porque lo que padecemos», dicen, «es consecuencia del mal funcionamiento de los servicios públicos».

Los responsables de los afectados de Leganés contradicen las afirmaciones con respecto a la curación de los enfermos hechas por el director general de la Salud Pública, doctor Valenciano, quien, por otra parte, ha declarado que «alrededor de 12.000 enfermos sanarán previsiblemente, mientras que quince o dieciséis casos pueden considerarse perdidos», según recoge el diario alemán Frankfürter Allgemeine Zeitung.

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha manifestado, a través de una nota de Prensa, su satisfacción por la reciente creación de una Secretaría de Estado para el Consumo, pues opina que «esto puede suponer un importante paso en beneficio de los consumidores». La OCU, dice, «da la bienvenida al nuevo secretario, José Enrique Martínez Genique, y confía en la eficacia de este organismo para el control y vigilancia del estado de los productos alimenticios».

Por otra parte, varias personas de la localidad leonesa de Mozóndiga, una de las más afectadas en la provincia a causa del envenenamiento por consumo de aceite adulterado, van a solicitar la correspondiente indemnización. Según Efe, estos vecinos de Mozóndiga se han puesto en contacto con un abogado de León, quien tramitará los casos y, a su vez, los remitirá a la (OCU), que también se ha hecho cargo de las acciones que puedan emprender los perjudicados por el aceite tóxico.

Programa nacional de seguimiento de afectados

La creación de un programa nacional de atención y seguimiento de los afectados por el síndrome tóxico, con rango orgánico de subdirección general, fue uno de los principales reales decretos aprobados en el último Consejo de Ministros. El decreto, al que ha tenido acceso Efe, dice, entre otras cosas, que dicho programa funcionará «como uno más de los órganos de coordinación establecidos en el Ministerio de Trabajo, Sanidad y Seguridad Social, para la dirección, coordinación y seguimiento de la epidemia tóxica».