Moderada satisfacción en Andalucía

El presidente de la Junta de Andalucía, el socialista Rafael Escuredo, declaró ayer a la agencia Efe que la apertura de la verja le parecía un hecho positivo, «siempre y cuando», dijo, «suponga que las negociaciones sobre Gibraltar van por buen camino y se entienda este hecho como un gesto de buena voluntad por parte del Gobierno español».A juicio del presidente andaluz, el futuro de Gibraltar no puede ser otro que el de la soberanía española. «Una vez que Gibraltar esté bam jo soberanía española», añadió, «el pueblo gibraltareño deberá decidirse por una autonomía propia o por su incorporación a la comunidad autónoma andaluza».

Este último supuesto está previsto en el Estatuto de Autonomía de Andalucía, por lo que no habría ningún problema para la incorporación de Gibraltar a la comunidad autónoma andaluza. No obstante, el presidente Escuredo ha insistido en que será el pueblo gibraltareño el que tendrá que decidirse.

Por otra parte, el alcalde socialista de La línea de la Concepción, Juan Carmona, declaró estar «muy contento» con la noticia de la apertura de la verja, y añadió que tal decisión era muy esperada en la localidad tras los acuerdos de Lisboa, «aunque aquí consideramos que la medida llega tarde, ya que el espíritu de los acuerdos de Lisboa, rubricados por Marcelino Oreja y lord Carrinhgton, debía haberse plasmado antes de terminar 1981 ». «Pero, en fin», continuó, «ahí está el anuncio de la apertura de la verja, que en nuestra ciudad ha sido acogido con júbilo, si bien para los ayuntamientos va a suponer enfrentarse con graves problemas, ya que hay que preparar a la sociedad en todos los órdenes para ofrecer una buena imagen a todas aquellas personas que nos visiten en su tránsito hacia o desde Gibraltar».

«Actualmente», prosiguió el alcalde, La Línea ofrece una imagen desastrosa: carece de infraestructura de tráfico, de comercio y de turismo. Es, por tanto, necesario arreglar todos estos problemas».

El alcalde de San Roque, el también socialista Eduardo López Gil, manifestó que se alegraba, entre otras razones, porque se iban a ver incrementados el turismo y la industria hotelera, «si bien», matizó, «en otros aspectos, como el laboral, no creo que Gibraltar esté en disposición de absorber mucha mano de obra, y si, como parece, se cierran los astilleros, aún peor».