La Caja Postal de Ahorros obtuvo una rentabilidad media del 2,2% en sus depósitos
Los beneficios obtenidos por la Caja Postal de Ahorros en el ejercicio de 1982 ascendieron a 6.249 millones de pesetas, lo que supuso una rentabilidad media neta del 2,2% sobre el saldo medio de los depósitos, según declaró el presidente del consejo de administración de la entidad, y director general de Correos, Ramón Soler Amaro, en una reunión mantenida con los miembros de la Asociación de Periodistas de Información Económica.
Esta rentabilidad, en la que jugó de forma especial la colocación de buena parte de los recursos ajenos en el mercado interbancario y en financiar parte del déficit del sector público, es de las mayores obtenidas por cualquier institución financiera española.Tanto el presidente del consejo de administración de la Caja Postal de Ahorros como Luis Delso, consejero delegado de la entidad, manifestaron en la presentación de estos resultados que no eran representativos de lo que se quiere que sea la Caja Postal en un futuro próximo y recalcaron que los objetivos básicos de la entidad se cifran en consolidar su posición de banco al por menor dedicado a la pequeña y mediana empresa y a las economías familiares.
Como justificación de estas tesis, argumentaron la existencia de cinco millones de cuentas corrientes abiertas en las más de 12.000 oficinas que tiene la caja repartidas en toda la geografía española y, sobre todo, en el cambio de orientación que se ha dado a la aplicación de los recursos ajenos en lo que va de año. En este sentido, reconocieron que mientras el año pasado el saldo de recursos ajenos colocados en activos monetarios -mercado interbancario, certificados de regulación monetaria y otros instrumentos de este tipo- alcanzaron la cifra de 77.000 millones, lo que produjo buena parte de los resultados, en los cinco primeros meses de este año se ha invertido la tendencia a este tipo de inversión y en la actualidad la cantidad de dinero colocada en activos monetarios se sitúa en 46.000 millones.
Esta cantidad muestra más a las claras el cambio de tendencia en la gestión de la Caja Postal si se tiene en cuenta que además de esta disminución en términos absolutos se ha producido un incremento sustancial en el crecimiento de los depósitos de esta entidad, lo que significa una mayor dedicación a las economías domésticas y a la problemática de la pequeña y mediana empresa. En este sentido, los responsables máximos de la Caja Postal señalaron que en el período enero-mayo el crecimiento de los depósitos era del 10,2%, mientras que los correspondientes al conjunto de la banca o de las cajas de ahorro era bastante inferior.
Agresividad comercial
La domiciliación de nóminas en cuentas de la Caja Postal y una agresividad comercial importante a la hora de captar recursos del sector público serían las causas inmediatas de este importante crecimiento de depósitos. Lo primero se explica, en opinión del consejero delegado de la entidad, en función de que hay algunos productos, como los créditos hipotecarios a tipos de interés más bajos del mercado, claramente competitivos a la hora de obtener nuevos clientes. El traspaso de cuentas del sector público de otras instituciones financieras a la Caja Postal se habría debido exclusivamente a las condiciones ofrecidas, claramente competitivas con las de las demás instituciones financieras.
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