La fuga de dos niños alemanes hasta Mérida pudo ser un montaje para rodar una película
La aventura de Alejandra y Mare Racke, los dos niños alemanes que el pasado 25 de agosto desaparecieron de su domicilio en Sulzburg y fueron encontrados en Mérida (Badajoz) parece que ha sido un montaje de la familia que trata de rodar una película con la historia vivida por los hermanos. Ayer volvieron con sus padres al colegio Hernán Cortés de Badajoz, donde permanecieron un día entero aguardando que alguien se hiciera cargo de ellos, aunque en esta ocasión el propósito era cinematográfico.
El director del centro cuando vio al fotógrafo y a los protagonistas de la historia en la puerta del colegio salió para prohibirles terminantemente que la imagen de su institución pudiera aparecer en el filme.Se confirma así el rumor que corrió el día del rescate, de que todo se trataba de un montaje y que la espectacular fuga de Alejandra de 12 años (que durante más de un mes viajó por parte de Europa y de España con el pasaporte de su madre, fingiendo ser una mujer de 21 años y afirmando que su hermano Marc de cuatro años era en realidad hijo suyo) no era más que una historieta del matrimonio alemán deseoso de sacarle partido económico al rocambolesco viaje de sus hijos.
La segunda fuga
Alejandra y Marc, según la versión inicial del suceso, escaparon de su casa por segunda vez y recorrieron España sin otro objetivo que el de vivir aquí porque a la niña le gustaba este país. 45 días después de que desaparecieran de su domicilio en la República Federal de Alemania, los dos hermanos fueron reconocidos en Mérida por una joven que había visto su foto y la dramática llamada de sus padres en una revista del corazón.
Se emprendió rápidamente el rescate y los progenitores volaron desde el sur de Alemania para buscar a sus hijos, a los que recibieron entre lágrimas, abrazos y bofetones. Ahora varios días después, han vuelto al escenario rodeados de fotógrafos para construir fielmente la historia.
El director del Hernán Cortés, Enrique Vázquez, ha mostrado su disgusto por el hecho, "puesto que", ha manifestado, "me parece de muy mal gusto que todo haya sido una comedia, ya que durante toda una noche el personal del colegio estuvo pendiente de Alejandra que pretendía tirarse por una ventana antes que volver a su país, ahora vemos que todo fue una farsa montada por la familia para sacarle provecho a los niños".
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