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Esa lágrima perezosa que rehúye al mañana en soledad

Por una de esas carambolas numéricas, el índice general de la bolsa permaneció ayer inalterable, aunque esa aparente sensación de tranquilidad nada tiene que ver con lo que sucedió en la realidad.Algunos operadores han visto en esta quiebra de la tendencia alcista las primeras muestras de un posible cansancio del mercado. En esa apreciación coinciden algunos analistas técnicos, que jamás han pensado que el termómetro de la bolsa pudiera rebasar ampliamente la cota 115% en la presente fase.

Esta primera impresión tiene cierto apoyo gracias al importante y recalcitrante tema de los intercambios de activos eléctricos. Los analistas habían venido repitiendo que las informaciones sobre el principio de acuerdo entre las compañías -sin saber casi nada del fondo del arreglo- permitieron abrir muchas incertidumbres psicológicas de las instituciones. Ahora no han sido muy bien recibidas por el mercado esas noticias sobre el amargo caramelo que se quiere dejar a Endesa, por la posibilidad de que el proceso de acercamiento se vea seriamente amenazado.

Así, la jornada ha sido óptima para aquellos inversores que se han contentado con ganar los suficientes enteros en esta época de subidas y decidieron emprender todas las realizaciones de beneficios posibles. Pero el dinero no ha faltado a la cita y ha absorbido casi todo el papel. Los descensos sufridos por el corro eléctrico son los típicos de estas sesiones de pulso. Pero el fondo continúa con buen color, ya que a la hora de trazar una línea maestra die análisis fundamental parece difícil que la Administración permita un naufragio de los intercambios, aunque éstos supongan un sacrificio para una empresa pública, la más rentable del Instituto Nacional de Industria.

"Audacia, audacia y audacia" es un lema recomendado por casi todos los gurús a la hora de actuar en la selva bursátil. Pero ahora parece que bastantes ahorradores han preferido, la prudencia y han dirigido sus dineros hacia valores muy selectivos del sector industrial, en espera de que el corro eléctrico aleje las nubes, que vienen encapotando su horizonte desde hace demasiado tiempo. En todo caso, los volúmenes de contratación son lo suficientemente amplios como para permitir el afianzamiento de las posiciones optimistas. El lunes se negociaron 3.187,2 millones de pesetas efectivas.

Cuando se quieren encontrar razones para pedir calma se encuentran incluso en ese recorte de Telefónica, casi de dos enteros, sin que hayan aflorado los nervios de los cuidadores de este valor, como si los futuros recorridos fueran una garantía de nuevas elevaciones.

El precio del dinero, por su parte, se mantiene a niveles semejantes a los de jornadas anteriores. La subasta de préstamos del Banco de España a un día se situó al 11 %, los pagarés a un mes al 9,5% y a tres meses al 9,75%; es decir, a los mismos precios que en sesiones precedentes. En el mercado interbancario el dinero a un día se fijó al 10,62% (10,64% lajornada anterior), al 10,30% a siete días (10,25%), al 10,31% a 15 días (10,24%), al 10,69% a tres meses (10,50%) y al 11,68% a seis meses (11,52%).

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