Los funcionarios judiciales colombianos exigen el cese del ministro de Defensa y del jefe de la policía
La Asociación Nacional de Funcionarios y Empleados de la Rama Judicial (ASONAL) de Colombia exigió ayer ha dimisión del ministro de Defensa, general Miguel Vega, y del comandante de la policía, general Víctor Delgado, por su actuación durante la ocupación del Palacio de Justicia de Bogotá, realizada el pasado 6 de noviembre por guerrilleros del Movimiento Diecinueve de Abril (M-19). Ésta es una de las primeras consecuencias de las revelaciones hechas por la comisión oficial investigadora del suceso. El informe, redactado por los jueces Carlos Upegui y Jaime Serrano, se conoció el miércoles, al levantarse el secreto sumarial.
La poderosa ASONAL, que agrupa a jueces y personal administrativo de los tribunales, adoptó tal decisión basándose en las declaraciones hechas a la comisión oficial por el ministro de Justicia, Enrique Parejo, según las cuales el jefe de la policía actuó al margen de las decisiones adoptadas por el Consejo de Ministros. El informe de la comisión concluyó que el general Vega "estuvo mal informado" sobre la vigilancia de la fuerza pública al Palacio de Justicia, que fue retirada, "inexplicablemente", el día del asalto al edificio.Según ASONAL, la investigación "confirma, una vez más", sus anteriores denuncias, que señalaban "como responsables del genocidio del Palacio de Justicia a los enemigos de la paz y el militarismo". La declaración de este organismo gremial hace un llamamiento al pueblo colombiano para "exigir un juicio de resporisalbilidades contra quienes, por acción u omisión, desencadenaron la masacre" del 6 de noviembre pasado.
Serenidad para juzgar
A su vez, el ministro de Justicia opinó, tras la difusión de lo ocurrido en el asalto, que "no hay la serenidad espiritual suficiente para juzgar eses episodios". Es necesario esperar para que "pueda haber un juicio más tranquilo", añadió. Descartó que se hubiera producido un enfrentamiento entre él y las Fuerzas Armadas; "lo que hice fue dejar a salvo la responsabilidad de algunos rninistros".Parejo, en su declaración a los investigadores, afirmó que el GaIúnete solicitó al jefe de la policía que suspendiera el ataque mientras se intentaba un diálogo con los guerrilleros. Sin embargo, esta decisión no fue respetada por el responsable policial que, en una operación de un cornarido espec¡al, ordenó la entrada al cuarto piso del edificio.
Insistió en que se trató de buscar "contacto con los guerrilleros", pero nunca "se pensó que los acontecimientos se fueran a precipitar tan rápidamente como aconteció. Eso no lo previó nadie".
Comentando el hecho de que el presidente, Belisario Betancur, no aceptara hablar con el juez Alfonso Reyes, presidente de la Corte Suprema de Justicia y rehén del M-19 en el palacio, el ministro manifestó que esa situación "no fue la clave" para el sangriento desenlace, pero que "ya habrá oportunidad de hacer claridad sobre lo ocurrido".
Una toma anunciada
Por otra parte, ayer se divulgaron otros fragmentos de la investigación de la comisión oficial y se reveló que el asalto al edificio judicial fue "una toma anunciada" por el M-19. El 23 de octubre del año pasado la organización guerrillera envió a una emisora de Bogotá una grabación en la que se indicaba que iban a realizar "algo de tanta trascendencia que el mundo quedaría sorprendido". Por esos mismos días la Prensa colombiana informó que el Ejército había descubierto un plan del M-19 para tomar el Palacio de Justicia. El servicio de inteligencia del Ejército tuvo conocimiento del plan al capturar a dos integrantes de esa organización guerrillera con planos del edificio. Sin embargo, y pese a todos estos indicios, el local judicial estaba sin vigilancia de la fuerza pública el 6 de noviembre, a diferencia de lo ocurrido en días anteriores.El propio M-19, en un comunicado posterior al asalto, ratificó que dos de sus miembros fueron apresados con planos del edificio, y que este hecho estuvo a punto de retrasar su operación, pero que al comprobar que la vigilancia no había sido alterada, pese a la detención de sus dos guerrilleros, se decidió continuar con su plan.
Mentís a Betancur
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