EL PSOE busca un 'peso pesado' para la alcaldía de Madrid

El resultado de las elecciones legislativas y autonómicas andaluzas del pasado día 22 está provocando importantes movimientos en todas las fuerzas políticas, que ya comienzan a prepararse con vistas a la próxima lucha electoral, para la que faltan apenas 11 meses: las elecciones municipales; y autonómicas de mayo de 1987. El PSOE está decidido a presentar un peso pesado como candidato a la alcaldía de Madrid, cargo que supondrá una de las principales batallas de esos comicios, junto con la alcaldía de Barcelona y, en segundo grado, las presidencias de ocho de los 13 Gobiernos autónomos en litigio.

Los socialistas necesitan revalidar el próximo mes de mayo de 1987 su triunfo electoral del pasado domingo mostrar que el partido no pierde el terreno conquistado hasta ahora; del análisis de los votos emitidos el pasado olía 22, el PSOE, ha concluido la necesidad de presentar a un peso pesado como candidato a la alcaldía de Madrid. Continúan citándose, entre otros, nombres como José Barrionuevo o Fernando Morán. El actual alcalde, Juan Barranco, se manifiesta dispuesto a ir como número dos de la lista. Asimismo, la dirección del PSOE se propone apoyar a Pasqual Maragall para que se mantenga en la alcaldía de Barcelona.Dimisión en Alianza Popular

Por otra parte, el presidente de Alianza Popular en Mallorca y vicepresidente del Consell de Mallorca, Juan Verguer, puso anoche su cargo a disposición del partido, informa Efe. Varguer, en declaraciones al Diario de Mallorca había afirmado, tras los resultados de las elecciones que "Fraga ha tocado techo y se hace necesario plantearse la conveniencia o no de su liderazgo".

La junta directiva nacional de Alianza Popular, que se reúne el próximo lunes en Madrid, tiene, en su orden del día la discusión de estrategias para el futuro, "especialmente ante las elecciones de 1987". Los dirigentes de AP consideran "muy probable" obtener en tales elecciones la alcaldía de Madrid -el candidato popular más citado es el liberal José Antonio Segurado- y la presidencia de los Gobiernos autónomos de Cantabria, Baleares, Canarias, las dos Castillas, Navarra, Murcia y La Rioja, sin que los decepcionantes resultados del pasado domingo en algunas de estas comunidades autónomas hayan logrado empañar, al menos oficialmente, el optimismo. Los asesores de Manuel Fraga -presidente de Alianza Popular (AP)-, ajenos a las especulaciones sobre el mantenimiento de su liderazgo, piensan ya en una nueva gira electoral por todas las comunidades autónomas en las que se celebrarán elecciones.

AP cuenta incluso con los nombres de los candidatos a encabezar las listas electorales en cada una de las autonomías citadas. Sin embargo, estos nombres se enfrentan en algún caso, como en las dos Castillas, a las pretensiones del socio democristiano, PDP, que desearía colocar al frente de ambas listas a dos de sus dirigentes (Rodolfo Martín Villa y Javier Rupérez). No puede descartarse que, pese a que la línea oficial dentro de AP sea el mantenimiento de la Coalición Popular , este enfrentamiento venidero se incluya también el lunes en las consideraciones de la junta directiva del partido acerca del futuro de la Coalición Popular.

También los democristianos del PDP incluirán sus aspiraciones sobre ambas Castillas entre los datos que considerarán cuando, el sábado, su ejecutiva estudie si debe o no mantener su alianza con AP.

La coalición Izquierda Unida también tiene puesta su mirada en las elecciones de 1987, especialmente en las municipales, donde considera que puede consolidarse con la obtención de más de un centenar de alcaldes y millares de concejales. Esta aspiración es, precisamente, la mejor garantía de que la heterogénea, IU se mantendrá cohesionada hasta entonces. La candidatura. de Ramón Tamames a la alcaldía, de Madrid se considera en IU "prácticamente fuera de toda duda".