Léopold Senghor pide que se defienda al creador, en un congreso sobre los derechos de los autores
"Sólo aquellos países que defienden los derechos de sus autores están en condiciones de defender su propia cultura" afirmó ayer Léopold Sedar Senghor, de 80 años, ex presidente de Senegal, repetidas veces candidato al Nobel de Literatura, durante la inauguración del 35º Congreso de la Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores (CISAC). La reunión se celebra a lo largo de esta semana en el Palacio de Exposiciones y Congresos de Madrid, organizada por la Sociedad General de Autores de España (SGAE), que cuenta con representantes de 60 países.
La apertura de este encuentro derepresentantes de medio millón de autores de todo el mundo pretendió ser una llamada de atención a la conciencia de los ciudadanos sobre los derechos de los creadores. Un intento de hacer comprender que los beneficios de una idea artística constituyen el único salario del artista. El ministro de Cultura, Javier Solana, no sólo suscribió esta idea expuesta por el presidente de la SGAE, Juan José Alonso Millán, sino que se comprometió, sin dar fechas, a enviar la ley de Propiedad Intelectual a las Cortes lo más rápidamente posible.El representante de los autores españoles, Juan José Alonso Millán, hizo un llamamiento de atención a sus compañeros para que ninguno se limite a disfrutar de los éxitos temporales y, por el contrario, fomente la vigilancia permanente de lo que son sus derechos artísticos y económicos.
Alonso Millán terminó hablando de uno de los mayores problemas que soportan los autores: la reproducción de su trabajo a través de las nuevas tecnologías y las dificultades legales con que se encuentran para poder controlar los beneficios de su trabajo. La posterior respuesta del ministro Solana pretendió tranquilizar al portavoz de los autores españoles, al asegurar que el proyecto de le, sobre la Propiedad Intelectual se ocupa de defender al artista frente a las últimas formas de reproducción.
Léopold Senghor, presidente desde hace dos años de la CISAC, aseguró que el único recurso del que disponen los creadores es la exigencia de que se respete el derecho de autor. "Sus normas deben ser para nosotros tan obligatorias como el código de la circulación. Esas normas son indispensables para todos nosotros y debemos exigir primero su existencia y segundo su cumplimiento". Senghor hizo un llamamiento a los representantes de los autores para que actúen con realismo, invitándoles a vigilar y a trabajar al mismo tiempo. "La técnica va por delante del derecho", dijo, refiriéndose al peligro de las nuevas tecnologías, pero nuestra obligación es exigir que nunca la ciencia olvide el derecho".
Respecto a los beneficios inmediatos que el congreso pueda tener sobre los autores, españoles, el vicepresidente de la SGAE, Eduardo Bautista, aseguró que ante todo se quiere hacer un llamamiento a los intelectuales para que formen un grupo de presión capaz de hacer sentir su peso ante el Gobierno. "En España no existe actualmente una conciencia entre los artistas en el sentido de que tengan claro que su salario está en hacer valer sus derechos de autor. Todo el mundo conoce lo que es la propiedad privada, pero son muy pocos los que tienen claro lo que es la propiedad intelectual. Nosotros, como SGAE, nos sentiríamos satisfechos si el congreso sirviera para aclarar que cada autor tiene que correr la suerte de su obra y que todo lo que ésta produzca es el salario del creador".
El 35º congreso sobre los derechos de autor se prolongará a lo largo de la semana. Hoy por la tarde está previsto que sea formalmente inaugurado por los reyes, Juan Carlos y Sofía. Durante la mañana se hablará de la Convención de Berna y de la situación actual de los derechos de autor. La piratería, la remuneración del creador, el control de las obras audiovisuales son algunos de los temas que se analizarán en estas jornadas.
Babelia
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