Un Parlamento con tres sedes en tres países distintos

., El Parlamento Europeo tiene tres sedes -Estrasburgo, Luxemburgo y Bruselas-, pero la capital belga tiende paulatinamente a convertirse en el principal foro de sus actividades, a pesar de las protestas de las autoridades de los otros dos países que le hospedan.

En Bruselas se celebran las comisiones parlamentarias; en, Luxemburgo funciona la secretaría administrativa y se reúnen los grupos políticos, y en Estrasburgo se desarrollan las sesiones. Más de un eurodiputado se ha quejado de que el Parlamento Europeo, el más numeroso del mundo, "es el único cuyos plenos tienen lugar a 500 kilómetros [la distancia que separa a Estrasburgo de Bruselas] de la sede de su Ejecutivo".

Al margen de mermar la eficacia política de la Asamblea, este alejamiento constituye un permanente motivo de trastorno. Cada mes se organiza de Bruselas y Luxemburgo a Estrasburgo la migración de parte de sus 3.200 funcionarios, a los que se añaden los ayudantes de cada grupo político y el archivo y la documentación, transportada en numerosos baúles metálicos. El gasto de esta transhumancia periódica es estimado en 4.750 millones de pesetas.

Para manifestar.su descontento, el Pleno del Parlamento votó en octubre de 1985 una resolución solicitando la construcción en la capital belga de un hemiciclo donde poder reunirse. A pesar de que el texto aprobado no tiene ningún carácter ejecutorio, el Gobierno francés considero oportuno recurrirlo ante el Tribunal de Justicia de la CE y ahora está pendiente del fallo.

Anticipándose a los deseos del Pleno, los grupos políticos se reúnen casi siempre en la sede bruselense del Parlamento y, conformándose a la resolución de 1985, el Gobierno belga ha aecidido iniciar por su cuenta y riesgo la contrucción en el barrio comunitario de Bruselas de un edificio de 25.000 metros cuadrados, cuyo hemiciclo tendrá capacidad para 600 escaños, por sí el ingreso de algún nuevo Estado en la CE obliga a incrementar el número de eurodiputados. Casi enfrente se está edificando una nueva sede para el Consejo de Ministros de los doce, que dispondrá de 214.000 metros cuadrados de despachos y'aparcamientos.

Temeroso de perder sus últimas prerrogativas, el Gobierno luxemburgués denunció en un comunicado el pasado lunes el "peligro grave e irreversible que la obra representa para Luxemburgo y Estrasburgo", y pidió aclaraciones Al Gobierno belga. Nada impide, sin embargó, al Ejecutivo encabezado por el socialcristiano flamenco Wilfried Martens seguir adelante con su proyecto, con lafirme esperanza de que algún día el Parlamento Europeo alquilará el hemiciclo para celebrar sus plenos en Bruselas.