El presidente lamenta que El Pimpi no le haga caso

EMILIO MARTINEZ Marcelino Moronta, presidente de la corrida de ayer, se quejaba en la puerta de cuadrillas, antes de comenzar el festejo, de que el contratista de los caballos de picar, El Pimpi, no hace ni caso de sus recomendaciones para que los caballos salgan a la plaza sin manguitos. "A mis compañeros les sucede lo mismo", señalaba; estamos hartos de indicarle que son antirreglamentarios" . Al señalarle que él es la máxima autoridad y puede tomar otras medidas en las que intervengan el delegado que tiene en el callejón y la fuerza pública, Moronta respondió que su misión es elevar propuestas de multas a la autoridad gubernativa, que es la que debe imponerlas.

Moronta añadió que él también ha propuesto a varios picadores para que sean multados, por realizar indebidamente la suerte de varas: "Como todos los años, en el primer tercio es donde se producen más irregularidades". Otro de los presidentes de Las Ventas, Tomás Tejero, también ha elevado solicitud de multa para dos picadores en lo que va de feria.

Los espadas que en la corrida de ayer en Las Ventas se quejaban, al acabar el festejo, de la escasez de fuerzas y poco casta de los toros de Manolo-González, que estuvieron siempre a la defensiva. Mientras Manzanares declaraba estar contento con sus faenas, "a pesar del sector del público que siempre me pita y del que paso" -dijo-, Ortega Cano se mostraba contrariado: "Los toros tenían un peligro sordo, que no trascendía al tendido, y no he podido sacarles partido".

Mejora José Luis Ramos

El novillero José Luis Ramos, herido muy grave en el festejo del psado día 18, salió ayer de la Unidad de Vigilancia Intensiva de la clínica Nuestra Señora de Loreto, pasando a ocupar una habitación normal. El doctor que le operó, Máximo García Padrés, le ha comunicado que de ir bien las cosas deberá permanecer al menos una semana todavía en la clínica. La intención de Ramos y de los familiares que le acompañan, su madre y su hermano Joaquín, así como la de su apoderado, Juan Luis Carreño, es que después se le traslade a la residencia de la Seguridad Social de Salamanca, donde seguirá su recuperación y rehabilitación durante cinco o seis meses. El novillero, todavía con molestias que le impiden a veces dormir, señaló que se encontraba con la moral restablecida y con enormes ganas de torear: "Sé que eso va a tardar algún tiempo, pero esta cornada ha aumentado mi vocación de torero". A media mañana recibió la visita de Joselito, que se marchaba a seguir su curación en su casa. El matador de toros tuvo palabras de ánimo para el novillero: "Vas a reaparecer en los ruedos antes que yo", le dijo Joselito a un emocionado Ramos, querío pudo evitar unas lágrimas. Joselito tiene cita con los médicos los días 26 de mayo, fecha en la que estaba, anunciado en Las Ventas y en la que le sustituirá de nuevo Roberto Dominguez, y 8 de junio.