Un Monarca en Hollywood
., Jane Fonda, la actriz que hace sudar y pone en forma a Norteamérica con sus vídeos de ejercicios aeróbicos, estaba previsto que se sentara ayer a la mesa junto con el Rey de España y la Reina en una cena en el Museo de Arte Contemporáneo de Los Ángeles., ofrecida a los Reyes por el alcalde de la ciudad, Tom Bradley. Con la resplandeciente Fonda, el símbolo de los opositores a la guerra de Vietnam y de casi todas las causas perdidas en este país, estaban invitadas a la cena otras figuras de Hollywood, la meca del cine, que "ha ganado para esta ciudad", recordó el Rey en un breve discurso, "el significativo título de fábrica de sueños del mundo occidental".
La cena de gala iba a mezclar a los jóvenes representantes de una añeja familia real europea con estrellas como Bill Cosby, el primer actor y showman de televisión de este país (portada de la revista Time la semana pasada y la figura del mundo del espectáculo que más gana en el mundo), o John Forsyth, el patriarca de Dinastía.
También estaban invitadas la clásica Angie Dickinson (Río Bravo, Jessica), con su marido, Burt Bacharach, uno de los mejores compositores de Hollywood (autor de la música de Dos hombres y un destino). La cena contó, entre otros, con la presencia de Dionne Warwick -estrella de la canción de raza negra-, Sammy Davis -no estaba invitado Frank Sinatra-, el cantante José Feliciano, el actor Walther Matthau y el compositor y músico Henry Mancini.
También acudieron a la cena de gala del museo personalidades del mundo de la cultura y de los raedios de comunicación, como el director de Los Ángeles Times, Tom Johnson, y uno de los presidentes del grupo editor del periódico -uno de los mayores holdings de Prensa de EE UU-, Richard Erburo.
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