El cante de los Mairena
Que el cante de los Mairena no murió con don Antonio nos lo recuerda siempre que canta su hermano Manuel, y a veces con una rotundidad definitiva. Como en esta ocasión lo hizo en Oviedo. Muchos buenos aficionados asturianos nunca le habían escuchado en persona, y quedaron maravillados con el eco y el sonido de su casa, que ya están en la historia.Manuel Mairena tuvo una noche especialmente afortunada. Todo lo que hizo anduvo al hilo de la perfección, yalgunos de sus cantes fueron sencillamente ejemplares. Los tientos, sin ir más lejos; es un género al que pocos cantaores dan la grandeza que exige su enorme belleza. Por siguiriyas Manuel dio un verdadero curso, haciendo un grandioso recorrido por estilos de enorme dificultad. Bulerías por soleá, bulerías, tonás y saeta completaron un recital admirable, en el que fue fundamental la guitarra de Enrique de Melchor, siempre magistral, en esta ocasión modélica.
II Cita Flamenca Ciudad de Oviedo
Guitarra en concierto: Víctor Monje, Serranito, con óscar Luis. Manuel Mairena al cante, con Enrique de Melchor al toque. El baile de Carmen Cortés, con el cante de Ramón el Portugués y Guadiana y el toque de Mario Cortés y Diego Losada. Teatro Campoamor, 12 de febrero.
El concierto de guitarra tuvo un espléndido protagonista en Serranito, secundado con solvencia por óscar Luis. Su toque inicial por tarantas fue un manantial de sonidos de increíble belleza.
Carmen Cortés, por, último, dejó constancia de su clase de bailaora que trata de inyectar nuevas ideas al baile flamenco. El cante atrás del Portugués fue de los que quedan en el recuerdo.
Babelia
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