Más de 40 palestinos han muerto a causa del gas lacrimógeno, acusa Amnistía

La organización humanitaria Amnistía Internacional (AI) ha denunciado el "empleo abusivo" de gases lacrimógenos por parte de efectivos del Ejército israelí que han causado, directa o indirectamente, más de 40 muertos en la represión de los incidentes de los últimos meses en los territorios ocupados de Cisjordania y Gaza.La organización, con sede en Londres, ha pedido al Gobierno de Israel que investigue las denuncias acerca de estas muertes ya que, dice, Amnistía Internacional "no está en condiciones de verificar el motivo exacto de la muerte en todos los casos de que ha tenido conocimiento".

El informe de Amnistía Internacional asegura que "casi todas las presuntas víctimas pertenecían a sectores de población vulnerables a la inhalación de estos gases: bebés, ancianos y enfermos, especialmente los que sufrían enfermedades respiratorias".

Pese a que los gases lacrimógenos son medios antidisturbios concebidos para su uso al aire libre, dice Al, "efectivos de la Fuerza de Defensa israelí los han arrojado o disparado al interior de viviendas particulares, clínicas, escuelas, hospitales y mezquitas de los territorios ocupados".

El informe de Al presenta siete casos concretos de palestinos muertos poco después de haber sido expuestos a grandes dosis de gas lacrimógeno, aunque las causas precisas de la muerte no pudieron ser precisadas por la ausencia de autopsias.

"Las pocas autopsias ordenadas por las autoridades israelíes -a las que no han tenido acceso los familiares- han dado como resultado la atribución de la muerte a ataques cardiacos", dice el informe. Una de ellos era un bebé de cinco días que falleció en su cuna después de que los soldados dispararan botes de gas lacrimógeno en su vivienda.

La organización envió el 1 de junio un télex al ministro de Defensa israelí, Isaac Rabin, para exponerle los "preocupantes informes" recibidos, pero no ha obtenido respuesta.