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Separaciones

JOAQUÍN VIDAL Veinte mil duretes les van a pasar de pensión el duque y el marqués a sus consortes respectivas por la separación matrimonial. Un día no acuden a la montería porque les da la tos, y lo que ahorran equivale a dos años de pensión. En ambio, si esa pensión la ha de pasar un empleado, le hunden en la miseria. Lo cual no empece para que los haya en ese caso, así tengan un sueldecillo, esté un hijo a su cargo, para darle de comer se vean condenados al pluriempleo, la separada trabaje y gane.

También hay empleados que pasan pensiones ridículas, así la separada no trabaje ni gane y esté a su cargo toda la prole. Y otros muchos que se fueron a por tabaco y no pasan ninguna. El colectivo de separados es un circo. Empieza por el propio proceso, cuya duración depende de misteriosas causas. Algunos ciudadanos tardan años en conseguir sentencia, mientras gente famosa se devuelve el rosario de su madre y a las pocas semanas ya tiene resuelto el asunto. Ocurre en las separaciones igual que en la vida misma: unos nacen con estrella, y otros, estrellados. La cuestión estriba en el juzgado que vaya a instruir. Los abogados conocen bien cuál es expeditivo o moroso; fija pensiones bajas o cuantiosas; concede la guarda y custodia de los hijos al padre más capacitado o a la madre siempre, aunque esté como una regadera. Y luego, los incidentes. Una madre -o un padre- que funde la pensión en copas, se desentiende de la hija y no le paga el colegio, puede hacerlo impunemente o se entera de lo que vale un peine según el juzgado que entienda la causa.

Como los jueces tienen discrecionalidad interpretativa, a su puestos semejantes quizá correspondan sentencias distintas, y entonces habrá cierta justicia individual, mas no equidad para el conjunto de la ciudadanía. Grave situación, insostenible en un Estado de derecho. El ministro del ramo ha declarado: "Los españoles tendrán la justicia que merecen". Muy bueno lo suyo, pero mientras llega tan ambiciosa aspiración se contentarían con que por lo menos no fuera una tómbola.

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