El PSOE vuelve a prometer un nuevo Código Penal

El ministro de Justicia, Enrique Múgica, anunció ayer la elaboración de un nuevo Código Penal para la próxima legislatura durante la clausura del Congreso Intemacional, sobre Violencia y Criminalidad, celebrado en Madrid esta semana. El programa electoral socialista de 1982 incluía ya esta promesa, que calificaba de "objetivo prioritario".Una conclusión del congreso, organizado por Interior y que ha reunido a agentes de 18 países y de todas las policías españolas, indica que para erradicar el terrorismo no deben aplicarse los beneficios penitenciarios a miembros de bandas armadas.

El ministro dijo que la capacidad de realizar nuevas enmiendas al actual Código Penal está "saturada". Múgica agradeció a las delegaciones presentes -todas latinoamericanas, excepto la de Portugal- las conclusiones a las que habían llegado, e insinuó su estudio.

Las conclusiones del congreso señalan: "El terrorismo es un delito de lesa humanidad, y como tal debe ser sancionado por el ordenamiento jurídico de todos los Estados. Para erradicarlo se hace preciso":

1. Un mayor endurecimiento de las penas que en la actualidad se tipifican en las leyes.

2. Que no se apliquen los beneficios penitenciarios, salvo al arrepentido que colabore.

3. Que los poderes públicos deben arbitrar una definición clara de lo que se entiende por apología del terrorismo y aplicar las medidas legales para que su penalización quede garantizada.

4. Que el terrorista, considerado como delincuente común, debe ser tratado como tal en los centros penitenciarios y convivir con el resto de los delincuentes".

Un portavoz de Interior manifestó ayer que la segunda y cuarta propuestas cuentan con el respaldo de su departamento, y recordó que la exclusión de los terroristas de los beneficios penitenciarios está incluida en el programa del PSOE. El punto cuarto, por su parte, recoge la política de dispersión de presos etarras.

El ministro de Interior, José Luis Corcuera, expresó la actitud de "solidaridad y colaboración sin reservas" con los países latinoamericanos en la lucha contra el tráfico de estupefacientes. "Colombia está dando una dura batalla al narcotráfico", recordó Corcuera. Entre las conclusiones del congreso destaca la petición del "endurecimiento penal del cultivo, producción, elaboración y tráfico de estupefacientes", "la no legalización de la venta libre de drogas" y establecer "criterios objetivos que diferencien la tenencia del consumo".