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El PP pide que sea anónima la copia de los contratos que recibirán las centrales

El Grupo Popular ha presentado en el Parlamento una enmienda de devolución del proyecto de ley sobre el control sindical de los contratos y 19 enmiendas parciales, la más importante de las cuales propone que las copias básicas de los contratos que se deben entregar a los comités de empresa y delegados de personal no contengan el nombre y apellidos del trabajador, el Documento Nacional de Identidad, el domicilio ni el estado civil.Ante el debate parlamentario sobre el proyecto de ley que se iniciará el próximo jueves, la diputada Celia Villalobos argumenta que, si no se eliminan esos datos, se van a producir numerosos recursos individuales por imponer a los trabajadores unos derechos a terceros que ellos no han decidido. Su grupo está estudiando si procede presentar un recurso de inconstitucionalidad pero no ve claro que el proyecto de ley pactado por el Gobierno y los sindicatos UGT y Comisiones Obreras vulnere el derecho a la intimidad.

El resto de las enmiendas parciales del PP persiguen, según Villalobos, una mejora técnica del proyecto, mientras que la enmienda de devolución es justificada porque, con la redacción actual de la ley, se invade la esfera de intimidad del trabajador, se atribuye a personas privadas funciones propias de los poderes públicos y porque pone en riesgo el futuro de la concertación social tripartita mediante la imposición por ley de lo que debiera ser objetivo de la propia concertación.

La diputada popular asegura que se trata de unas enmiendas muy meditadas y está segura de que las centrales lo van a entender. Sin embargo ya se han producido las primeras respuestas críticas de los sindicatos y ayer Antón Saracíbar, de UGT, calificaba de "lamentable" la devolución pedida por el PP.

La dirigente de este partido asegura, no obstante, que su grupo es partidario de incrementar los derechos de información de los representantes de los trabajadores y, aunque tienen discrepancias con el contenido del proyecto de ley, considera que se ha dramatizado en exceso. Una alusión dirigida, sin nombrarla, a la patronal CEOE. En su criterio, el control de los contratos no va a crear grandes tensiones en la creación de empleo, aunque si va a influir negativamente en las relaciones entre los empresarios y los sindicatos. El que el proyecto de ley se pactase a espaldas de la patronal CEOE es uno de los aspectos más criticados por el PP y el diputado Rodrigo Rato afirmó ayer que "el Gobierno se busca cada año un enemigo".

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