Un pintor de la libertad
Nace Luis Quintanilla en 1893, en Santander, y muere en Madrid, en 1978, adonde había regresado dos años antes, una vez consolidada la democracia en España.Su vida, sus ideales políticos se entroncan directamente con su obra. Perteneciente a una familia de la alta burguesía, abandona todo por la pintura. Se instala en París en 1912, formándose-plásticamente en esa ciudad. Regresa a Madrid y comienza su importante carrera como pintor de frescos. En 1926, el cónsul Antonio Mosquera le encarga los frescos para el consulado de Hendaya. El duque de Alba le encarga otro para la sala de estampas del palacio de Liria (1927). Luis Araquistain le encarga dos grandes paños para la Casa del Pueblo (1931), y al año siguiente realiza los frescos para el pabellón de gobierno de la Ciudad Universitaria. En 1932 se presenta con el arquitecto Esteban de la Mora al concurso para el monumento a Pablo Iglesias, junto con el escultor Emiliano Barral. En ellos trabajaba cuando estalló la guerra española, pero fue, sin embargo, la piqueta la que los destruyó en 1959.
En 1934 realiza un fresco en el vestíbulo del Museo de Arte Moderno que hoy se encuentra en las colecciones del Centro de Arte Reina Sofía, proviniente del Museo Español de Arte Contemporáneo.
Negrín le solicita la realización de cinco frescos para el pabellón de la Feria Mundial de Nueva York, que no llegó a inaugurarse. Estas obras, realizadas en 1939 y pertenecientes al Estado español, están en paradero desconocido. Bajo el lema genérico de Ama la paz, odia la guerra, englobaba los siguientes trabajos: Flight, Pain, Hunger, Soldiers y Destruction.
Instalado en Estados Unidos, realiza en 1940, para la Universidad de Kansas City, un mural sobre el tema del Quijote, siendo éste, en palabras del artista, su última obra como pintor al fresco.
Babelia
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