Encarcelados los 'boixos nois' acusados de matar a un hincha del Español

La juez de guardia de Barcelona ordenó ayer el ingreso en prisión de cuatro de los cinco boixos nois acusados de la muerte de¡ joven francés Frederic Rouquier, de 20 años, tras el partido Español-Sporting. El quinto detenido, que pasó a disposición de un juzgado de Badalona, también ingresó en la cárcel de la Trinitat de Barcelona, centro de reclusión habitual de jóvenes. Doménec Calafell, padre de uno de los detenidos, acusó ayer a la directiva del Fútbol Club Barcelona de fomentar la violencia entre los miembros de los boixos nois.

Fuentes cercanas al caso señalaron ayer que los detenidos, cuatro de ellos skinheads, admitieron su participación en los hechos. La policía localizó algunas de las armas blancas que supuestamente fueron utilizadas para la agresión que causó la muerte a Rouquier y heridas de gravedad a José María Arboleas Martínez, que sigue internado en el hospital Clínico. Entre las armas, la policía encontró un machete.Los detenidos y ahora encarcelados en el penal de la Trinitat son José Antonio Romero Ors, de 20 años; Jorge Estévez Sánchez, de 19; David Ventura Aparicio, de 18; Francisco Javier Calaf Martínez, de 20, y Luis Calafell López, de 17. El gobernador de Barcelona, Ferrán Cardenal declaró que dos ellos eran socios del Barça.

Las mismas fuentes precisaron que el motivo del ataque de los boixos nois a los dos simpatizantes de las brigadas blanquiazules fue vengarse de la agresión que sufrió un miembro del grupo ultra del Barça hace un mes en la calle Mayor de Gràcia, ataque atribuido a los aficionados ultra del Español. Un portavoz de la policía confirmó que se está trabajando con esa hipótesis y se intenta llegar a alguna conclusión con las identificaciones de los que pudieron estar involucrados en los hechos de hace un mes.

Fuentes judiciales precisaron que los cinco detenidos ocupaban el mismo vehículo -parece ser que un Ford Fiesta-, propiedad de uno de ellos, y que cuatro de ellos descendieron del coche al ver a la víctima y a su acompañante en las inmediaciones del estadio. El quinto joven permaneció al volante, según las mismas fuentes, mientras sus compañeros se dirigían hacia el joven francés.

Domènec Calafell, padre del detenido, acusó al Fútbol Club Barcelona de fomentar la violencia en este deporte. Concretamente, dirigió sus acusaciones hacia el vicepresidente de la entidad, Joan Gaspart. Según dijo Calafell, su hijo Luis, de 17 años, al igual que muchos otros integrantes de los boixos nois, entraba gratis al Camp Nou por una puerta determinada del estadio -la número 48- aunque no llevara entrada ni carné de socio o abonado.