Un pacifista liberal al frente del KGB
De los nuevos nombramientos que se ha visto obligado a realizar el presidente soviético, Mijaíl Gorbachov, el de Vadim Bakatin al frente del la institución que durante decenas de años mantuvo aterrorizada a la población de la URSS, es, quizá, el más significativo. Bakatin es un antiguo colaborador de Gorbachov, que en 1988 fue designado ministro del Interior. Contrario a la violencia y de ideas liberales, Bakatin se negó a desarmar por la fuerza a los nacionalistas armenios y balticos, como lo exigía ura decreto que el presidente firmó en el verano de 1990.Después del vuelco conservardor que dio Gorbachov en otoño al volver la espalda al pIan de reforma económica acelerado, Bakatin fue la priniera víctima: fue cesado en noviembre para alegría de los conservadores del grupo parlamentario Soyuz.
Hoy, este hombre nacido en 1937, el mismo año en que comienzan las represiones Iliasivas por parte del organismo antecesor al KGB, tendrá que reformar de raíz esta institución y terminar para siempre con su sangrienta historia.
El duro Mijaíl Molséyev, era jefe del Estado Mayor, alcanzó a cumplir las funciones de ministro de Defensa un solo día. El hombre que había elegido Gorbachov para reemplazar al traidor Dmitri Yázov -quien, como los otros miembros de la junta, se encuentra detenido a la espera de juicicio- tuvo que ceder el puesto a Guennadi Sháposhnikov. Este general de 40 años, comandante de las Fuerzas Aéreas, fue el primer efe de una de las tres ramas de las Fuerzas Armadas que exigió que las tropas fueran evacuadas de Moscú.
Combatientes de Afganistán
Como nuevo jefe del Estado Mayor, en reemplazo de Moiséyev, asume VIadímir Lóbov, 56 años, que fue corriandante de las fuerzas del Pacto de Varsovia hasta la disolución de esta organización militar. Como primer viceministro, ha sido nombrado Pável Grachov, quien combatió en Afganistán y el año pasado se había puesto a la cabeza de las tropas de paracaidistas. Los ex combatientes de Afganistán estuvieron entre los simpatizantes y defensores de Yeltsin durante el golpe.Además de estos cambios, Yeltsin anunció a la multitud que también se había acordado con Gorbachov el reemplazo de Anatoli Lukiánov. Actualmente, este amigo del líder soviético desde sus años de estudiante es el presidente del Parlamento, y seguramente cuando hoy se reúna este organismo se procederá a su destitución. Lo que no está claro, es si se le juzgará por complicidad en el golpe. Los dirigentes rusos han denunciado que Lukiánov fue el ideólogo de la traición.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.