Los nueve bancos creados hace tres años administran unos depósitos de 88.136 millones de pesetas
Los nuevos bancos españoles autorizados en los tres últimos años por Economía, con el informe preceptivo del Banco de España, contaban al finalizar el pasado mes de julio con unos depósitos de 88.136 millones de pesetas. Esas entidades, que poseen un capital global de 14.761 millones de pesetas, presentan en sus balances a esa fecha una inversión crediticia por valor de 50.085 millones de pesetas, según los datos del Consejo Superior Bancario.
La suspensión de pagos del Banco Europeo de Finanzas (BEF) ha generado nerviosismo en el sector, que se ha acrecentado por las reticencias mostradas por las entidades prestamistas en el mercado interbancarlo. Las cajas de ahorros, principales prestamistas del BEF, han cerrado sus grifos. Los datos de las entidades (véase cuadro) no permiten sembrar tranquilidad en su seno. El pasado año lograron unos beneficios de 889 millones de pesetas y cuatro de los nuevos bancos vieron reducir sus beneficios con respecto al año 1989, lo que se demuestra un bajo rendimiento.Desde que se promulgara la ley sobre creación de nuevas entidades bancarias en noviembre de 1988, se han autorizado en España, el Banco Alcalá, el Sabadell Multibanca, el Banco Europeo de Finanzas, el Banco Universal, el Fibanc, la Banca Eurohipotecaria, el Banco Credipás, el Banca Finesor y el Privat Bank para operar como nuevas entidades. Los promotores debían cumplir requisitos de solvencia, conocientos financieros y, sobre todo, condiciones de honorabilidad.
Otras entidades compraron fichas bancarias. El grupo Ibercorp adquirió la ficha de la Banca Trelles. El actual BISF proviene del Banco de Gestión Comercial y el Banco de Inversión del Banco de Huesca.
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