La guerra en Bosnia
Después de una temporada oyendo y leyendo las noticias que nos llegan de la antigua y maltrecha Yugoslavia se podría llegar a determinadas conclusiones, así como a plantearnos ciertas preguntas:
1. Que aunque los serbios constituyen en Bosnia el 30% de su población, no deben abundar entre ellos mujeres, niños o ancianos. No puede tener otra explicación el que sea dificil que nos presenten, como información, fotos desgarradoras de mujeres, niños o ancianos serbios sufriendo las atrocidades de la guerra, como ocurre con los de otras etnias.
2. Que los irregulares serbios y el Ejército federal yugoslavo constituyen el máximo exponente en cuanto a potencia militar se refiere y un peligro para la paz
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mundial superior al que Pueda representar la prolongada orgía de sangre, que sigue desarrollándose en Kabul o en Somalia.
Nos gustaría que nos contasen una versión de los hechos narrada por los propios serbios, con la misma frecuencia que las que a diario nos llegan de sus oponentes. Entretanto, no nos queda más remedio que pensar que los serbios, aparte de crueles y soportar el último régimen filo comunista de los Balcanes, deben de ser muy -torpes, por su empecinamiento en seguir pegando tiros y no molestarse en dar explicaciones.
4. Que a la opinión pública internacional le debe producir la misma indignación las matanzas en Kabul, en Somalia, en el sur del Sudán o en Bosnia, por lo que desearíamos que nos explicasen por qué los sufrimientos de los habitantes de Sarajevo concitan mayor atención de los seleccionadores de noticias que los de otros lugares del planeta Tierra-
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