El Salón Cibeles da la pauta de lo que vestirá la mujer el próximo verano

Con la exhibición esta tarde de los 25 trajes -creados por 13 diseñadores que concurrieron al estadio de Montjuïc en la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos, el Salón Cibeles inicia la actividad que desde ahora y hasta el viernes arrojará nuevas luces en la indumentaria de la mujer para el próximo verano. La carpa levantada en el parque del Retiro, junto a los jardines de Cecilio Rodríguez, añadirá a la moda una teatralidad distinta a la de su marco habitual en el Palacio de Congresos. Un total de 15 desfiles pondrán una vez más a prueba, en esta 16ª edición de la pasarela, el estado creativo del diseño español.

El certamen, que cuenta con una ayuda de 160 millones de pesetas que son aportados en parte por el Instituto Madrileño de Desarrollo (Imade) y por el Ministerio de Industria y Energía, reúne a 60 expositores y acoge a 6.000 visitantes profesionales.Desde el Desfile de Creadores -como oferta balbuceante que comenzó a presentar en 1985, junto al certamen Imagenmoda, los avances de moda de los creadores españoles- hasta la definitiva denominación del Salón Cibeles, Madrid ha pugnado por constituirse en la plataforma más significativa de las colecciones de moda femenina, idea generada desde el Imade y secundada desde el Ministerio de Industria y Energía, en su momento, a través del Plan de Intangibles, con subvenciones a la industria de la confección y la partición geográfica del sector: la moda del niño, en Valencia, y la moda masculina, que tiene su plataforma de exhibición en la Feria Gaudí de Barcelona.

En franco contraste con lo que ocurre en Francia e Italia, España, que contaba en el mundo de la moda con las escasas pero enfáticas presencias de los clásicos Balenciaga, Pedro Rodríguez o Pertegaz, no había cogido aún en la década de los ochenta ese tren del prêt-á-porter. Desde su origen, el certamen Cibeles -que ahora cumple su 16ª y l4ª ediciones, como pasarela y salón, respectivamente- ha querido germinar esa secuela de creación en moda, latente en los discípulos de aquellos grandes maestros de la costura.

La evaluación de esta exhibición que se celebra en la capital de España dos veces por año, teniendo en cuenta este precedente, ha de pasar, pues, por la comprensión de una prioridad que tiene idéntica validez en lo histórico y en lo actual: la necesidad, en primer lugar, de apoyar y dar a conocer el trabajo de los diseñadores de moda españoles, y en segundo lugar, afianzar la oferta de la alta confección española en el mercado nacional, así como en el internacional.

Popularidad

Cuando a Leonor Pérez Pita, Cuca Solana, directora del comité de moda del Salón Cibeles desde 1986, se le pide evaluar los resultados, confiesa: "Ahí están. Nuestros diseñadores son ya conocidos, la acogida de los medios de comunicación de todo el mundo es importante, vienen compradores extranjeros. Hay empresas que se han dado a conocer, se han afianzado, son requeridas en las ferias internacionales y exportan. Y con respecto a las pasarelas de moda, Madrid es claramente la tercera ciudad, después de París y Milán".

"Como feria comercial, nuestra oferta es simbólica", afirma Cuca Solana. "Con 60 expositores realmente somos cuatro gatos, lo digo así de claro, y en este sentido no nos podemos comparar. Si atendemos a las cifras de ventas, posiblemente todos juntos vendemos la cuarta parte que Armani; sin embargo, en cuanto a la categoría del diseño, la oferta de Cibeles es muy buena", concluye Cuca Solana.

Actualmente, la estimación de ventas en la Pasarela Cibeles, que sitúa su número de visitantes profesionales en torno a los 6.000, ofrece una clara progresión en las ventas de los últimos cuatro años, que ha pasado de 1.800 a 4.000 millones de pesetas.

La feria se nutre con la aportación de 160 millones de pesetas, cantidad dotada por el Imade y compensada en números finales por los 25 millones de pesetas subvencionados por el Ministerio de Industria y Energía y por la recuperación de otros 35 millones por la venta de los pabellones a los expositores. "O sea, que los 100 millones de pesetas que quedan", afirma Cuca Solana, "es subvención pura y dura a la pasarela por parte de la Comunidad Autónoma de Madrid".

En un tiempo como éste, de crisis generalizada que vive la industria textil el director general del Imade, Rufino Orce, insiste igualmente en la necesidad de que la empresa pública siga arrimando el hombro en la continuidad de su política de ayuda. "Es lógico que siga apoyando. No tendría ningún sentido en este momento decir que como este barco se hunde, saltemos los primeros", reflexiona Cuca Solana.

El reto europeo

A la delicada coyuntura hay que añadir la dificultad que supondrá para el sector la caída de barreras arancelarias de finales de 1993, que, definitivamente, inclinará la situación en uno u otro sentido. "Todo va a quedar condicionado a la relación calidad / precio del producto y a la necesidad de tener detrás un apoyo industrial serio y una buena red de distribución", concluye Leonor Pérez Pita.

La carpa levantada en el corazón del parque del Retiro albergará en su interior un aforo de 1.200 plazas para contemplar en directo las propuestas que vestirán a la mujer la próxima temporada de primavera y verano.

Con la sola excepción del desfile de Loewe, que hoy atrae hacia su show room privado a un selecto grupo de espectadores, el resto de creadores integrará, a partir de mañana, miércoles, hasta el próximo viernes, el nutrido programa de desfiles que cuenta con Belén Batalla,Ángel Schlesser, Palacio & Lemoniez, Isabel Berz, Veva Medem, Roberto Verino y Purificación García, el primer día; el segundo, con nombres como Devota & Lomba, Jesús del Pozo, María Guardione, Pedro del Hierro y Victorio & Lucchino, cerrando la tercera y última jornada las creaciones de Antonio Pernas, Woolstock, María José Navarro, Dolores, Ángela Arregui, Charo Azcona, Jordi Cuesta, Nacho Ruiz y Antonio Alvarado. Todo ello, como se ve, conforma un cartel de firmas asiduas a la pasarela que deja también una oportunidad para los jóvenes talentos nacionales.

Al salón madrileño concurren, además de la prensa nacional e internacional acreditada en moda, la cada vez más creciente expectación de los medios de información económica, así como una treintena de cadenas radiofónicas y televisivas, entre1as que destacan la norteamericana de información continuada por satélite CNN, la británica BBC y la Fashion Tsushin de Japón.

Esta tarde se celebrará en la carpa de la Casa de Campo la exhibición a los medios de comunicación de los 25 trajes inspirados en Barcelona -creados por un total de 13 diseñadores españoles- que se sumaron al gran desfile en el estadio de Montjuïc en la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos.