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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Morbo fácil

El flagelo de morbo y mojigaterío al que algunas televisiones han sometido a la audiencia televisiva roza el cambalacherío. La señora Nieves Herrero se ha llevado la palma en eso. El afán por obtener récords de audiencia le llevaron a anunciarse desde temprano por la cadena SER en lo que sería más tarde su gran espectáculo en vivo y en directo. Vergonzante también que un profesional como Manuel Campo Vidal anuncie, como lo hizo, el encuentro del padre de una de las víctimas con quien halló los cadáveres de éstas en el telediario previo. Paco Lobatón también colaboró a la triste imagen de la "España negra". Así seguimos alimentando la ignorancia: con faltas de ética y estética, con faltas de respeto al fin. Como estudiante de periodismo que soy, confieso que me sentí avergonzado. Eso no es profesionalidad. Eso es carnaza para la comidilla de balcón a balcón. Si creéis que es lo que se debe dar profesionalmente hablando, continuad ahora con las imágenes del entierro; más tarde, un monográfico en Queremos saber sobre la pena de muerte; de aquí a un mes podéis volver a Alcàsser y realizar El mes después. Tampoco os olvidéis de salpicar la programación con alguna corrida de reses bravas. Con todo esto, os aseguro que tendréis audiencia y entre toda esta audiencia podéis sortear viajes a Sarajevo para que disfruten con la muerte en vivo y en directo.- Gavà, Barcelona. Se tuvo la iniciativa de regalar un poster de las tres niñas desaparecidas de Alcàsser (Valencia). Desde el primer instante me solidaricé como toda España, y coloqué el cartel con la foto de las tres chicas en el cristal de mi oficina cara al público. Mi deseo es colaborar en su localización y encontrarlas sanas y salvas. Tengo dos niñas de 20 y 15 años. Tras el trágico hallazgo mi corazón llora de rabia, dolor e impotencia en recuerdo de unos seres humanos, que manos asesinas trágicamente han segado sus vidas. Por esas y otras víctimas inocentes ¡no clamamos venganza, sólo exigimos justicia!- Abrabam Méndez Ramos un padre afectado. Barcelona.

Vaya por delante mi solidaridad con las familias de las tres muchachas de Alcàsser víctimas del cruel asesinato que en estos días nos ocupa.

Vaya también por delante mi respeto por los medios de comunicación en su labor de informar a la opinión pública sobre los distintos acontecimientos.

Pero, al lado de ello, quiero hacer llegar mi disconformidad más absoluta por la forma en que se ha llevado a cabo la información al respecto de este triste suceso.

Creo que nuestra sociedad ya tiene bastantes imágenes penosas como para regodearse en ese espectáculo tan demencial (del que sólo vi un minuto y me bastó) que algunos profesionales del periodismo ofrecieron a través de las cámaras de televisión.

Soy madre y maestra y todo este asunto me lleva a reflexionar sobre nuestro papel como formadores de los ciudadanos del futuro.

Como casi todas las cosas, la televisión en exceso y sin control puede ser muy nociva.

¿Es necesario que los niños vean y se apasionen desde pequeños delante de un televisor con toda clase de programas?

¿Es necesario que demandemos todo este morbo y convirtamos el sentimiento en un espectáculo de tamaño nacional?

Juzgue cada uno, pero me parece muy peligroso.

Y, si se me permite, una llamada de atención hacia la justicia a la hora de sus decisiones relativas a los permisos carcelarios.-

María del Pilar Martinsanz Blanco. Segovia.

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