Aznar asedió a González con la crisis, pero no dio alternativas para superarla
Felipe González y José María Aznar inauguraron anoche un capítulo de la democracia española. Por vez primera, los dos principales candidatos a la presidencia del Gobierno se enfrentaron en un debate cara a cara ante las cámaras de televisión. González, candidato del PSOE, se vio hostigado eficazmente por su oponente, el líder del Partido Popular, en la primera mitad del debate, que giró en torno a la crisis económica; sin embargo, Aznar no respondió a las preguntas del líder socialista cuando éste le requirió que concretase sus propuestas alternativas. En la segunda parte del debate, el líder conservador perdió algo de fuelle y González remontó en sus posiciones.
El debate comenzó pasadas las 22.30 y concluyó a las 0.43. El candidato del PP reiteró media docena de veces sus principales mensajes (paro, corrupción, despilfarro), en lo que constituyó a su vez una repetición de debates anteriores entre dirigentes del PP y del PSOE. En todo momento se atuvo al guión que han elaborado para él sus asesores electorales: habló en términos vagos y no concretó los detalles de su oferta electoral. "No quiero cambiarlo todo", dijo. "Quiero un cambio tranquilo y razonable".El candidato opositor, algo nervioso al comienzo, se fue asentando a medida que avanzaba el debate, hasta imponerse claramente en la primera parte, que duró 65 minutos. En la segunda (66 minutos), Felipe González recuperó el aliento y sus posiciones. Según una encuesta difundida de madrugada por el PP, Aznar había ganado el debate (50,1% de los encuestados, frente al 31,3% que creía que el vencedor fue González).
El candidato socialista también repitió con insistencia su idea principal: el avance de España en las infraestructuras, los transportes, la educación, la sanidad y la protección social. Y sobre todo martilleó con la ausencia de programa que, a su juicio, muestra el PP. "La derecha", aseguró, "sólo hace catastrofismo porque no tiene nada que ofrecer al país".
Además, González intentó protagonizar la noticia de la noche al anunciar que propondrá al ex juez Baltasar Garzón, ahora candidato socialista, como presidente de una comisión parlamentaria, que investigue la corrupción en los partidos.
Aznar emprendió su primera intervención a las 10.35. Ya en sus primeras frases, y como han hecho todos sus correligionarios del PP en anteriores debates televisivos, habló de "corrupción, paro y despilfarro".
El ataque de Aznar empezó así: "España vive una crisis muy profunda". Inmediatamente recordó que los parados suman ya 3,3 millones, que diariamente la tasa se incrementa en otras 2.950 personas y que son muchos los españoles que viven con la inquietud de engrosar ese registro. El líder del PP reiteró estos datos a lo largo del debate.
La defensa de González fue una continua apelación a la esperanza y a su fe en la sociedad española: "Esta crisis será corta y la podremos superar", afirmó. González recordó que desde 1989 en España hay un millón de personas más trabajando.
Aznar intervino en total 56 minutos y 24 segundos, y González, 55 minutos y 20 segundos.
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