Neonazis alemanes queman la vivienda de un afgano y profanan con cruces gamadas un cementerio judío
Las dos cruces gamadas y el "extranjeros, fuera de Alemania", pintados en la pared del edificio que ardió ayer en la localidad de Idar-Oberstein, en el extremo oeste de Alemania, revelan una nueva acción xenófoba. El edificio de dos plantas albergaba la tienda y la vivienda de un afgano que consiguió escapar del incendio descolgándose por una ventana trasera. Al otro lado de Alemania, en Worms, a orillas del Rhin, varias personas profanaron el domingo un cementerio judío y pintaron cruces gamadas en un centenar de lápidas.El goteo de agresiones antisemitas e incendios contra extranjeros sigue imperturbable a pesar de que las medidas del Gobierno y la más decidida actuación de la policía parecen haber logrado un descenso de la violencia de extrema derecha, desde que hace un año en Rostock, centenares de neonazis incendiaran un albergue para refugiados extranjeros, jaleados y protegidos por los vecinos del lugar.
Sube la militancia
Los incidentes son ahora menos descarados, más secretos, pero la violencia sigue. No es de extrañar. Según el informe anual del Verfasungsschutz, servicio de inteligencia alemán, sobre la violencia, a finales de 1992 había en Alemania 82 organizaciones de extrema derecha, con un total de 41.900 miembros, un 5% más que el año anterior. De ellos 6.400 son considerados como militantes activos, la mayoría skinheads (cabezas rapadas).A lo largo de 1992, el año en que Alemania vivió la mayor violencia neonazi, se produjeron 2.283 actos violentos contra extranjeros en los que murieron 17 personas; hubo 14 atentados con explosivos; 708 incendios provocados; 725 personas resultaron heridas, y en 1.122 casos se produjeron daños materiales. El land donde más actos violentos se registraron fue Renania del Norte-Westfalia, el más poblado de Alemania, pero en términos relativos se llevaron la palma Mecklemburgo-Antepomerania y Brandeburgo, los dos más pobres, en la ex Alemania Oriental.
De los 17 muertos, siete fueron extranjeros; cuatro, alemanes que discutieron con sus asesinos por opiniones políticas; tres, marginados; un alemán que vivía en un asilo para extranjeros; un parado y otro asesinato de carácter antisemita. En 14 de ellos se ha encontrado a los culpables; un total de 37 personas. Son todos hombres entre 16 y 30 años, y el 68% son skinheads.
El incidente más notorio de 1992 fue el incendio provocado en una casa habitada por turcos en la ciudad norteña de Mölln, que causó la muerte de tres mujeres turcas. Pero lo más espectacular fueron los incidentes en la ciudad báltica de Rostock, del 22 al 28 de agosto, en los que participaron más de 1.200 personas que contaron con el apoyo de 3.000 espectadores.
El informe cita hasta 75 publicaciones neonazis con una tirada total de 7.848.500 ejemplares. Diagnostica un creciente endurecimiento de los grupos violentos y reconoce que algunos atentados fueron cuidadosamente planeados, lo que indica una mayor organización dentro de la extrema derecha.
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