La Comunidad gestionará en 1995 el 15% del IRPF con un año de adelanto

El ministro de Administraciones Públicas, Jerónimo Saavedra, escuchó ayer en persona el llanto amargo del presidente de la Comunidad de Madrid, Joaquín Leguina, por la diferencia abismal entre lo que se financia desde el Estado a unas autonomías en comparación con otras". Leguina se siente maltratado, y no sólo económicamente. Saavedra le comunicó oficialmente que el Ministerio de Hacienda ha aceptado la sugerencia de incorporar a Madrid el 1 de enero de 1995 -con un año de adelanto a lo previsto- la gestión de todo el tramo del 15% del IRPF.

Leguina repasó con Saavedra una serie de cuadros en los que se demuestra "la diferencia abismal" entre lo que el Estado aporta a Madrid y el esfuerzo fiscal de esta comunidad. El presidente madrileño subrayó que, aunque la comparación más utilizada para expresar este desequilibrio es entre Madrid y Extremadura, también es apreciable entre Murcia por abajo y La Rioja por arriba.El presidente regional rechazó entrar en el debate sobre la territorialización de algunos gastos sociales: "Esta discusión pone en evidencia la estructura cohesionada del Estado". Sin embargo, matizó: "Quienes han empezado a discutir sobre esto deberían haberlo tenido en cuenta, ya que se exponen a que los demás contestemos".

Saavedra no explicó exactamente cómo será el proceso que permitirá que Madrid pueda gestionar todo el tramo del IRPF que se piensa ceder a las comunidades autónomas. Comentó que gracias a la "flexibilidad" del Ministerio de Hacienda será posible que la comunidad madrileña se haga corresponsable de la tramitación del 15% incluso sin que se le transfieran antes otros impuestos cedibles aún no asumidos (patrimonio, actos jurídicos documentados o juego). El ministro de Administraciones Públicas calificó como "bueno" y "dentro de plazo" el ritmo de traspaso de competencias.

La reforma del estatuto de Madrid contempla que en los próximos dos años la Comunidad deberá recoger 32 transferencias. Entre ellas destaca la responsabilidad sobre las cinco universidades de la región.

Saavedra adelantó que en octubre se formarán las comisiones mixtas de transferencias y de desarrollo estatutario necesarias para que este trasvase educativo, y también el social incluido ahora en el Inserso, pueda estar preparado el próximo 1 de enero.

Las preocupaciones

Leguina, no obstante, se mostró preocupado porque algunas transferencias se concedan sin control de coste efectivo y puedan originar más déficit al Gobierno autónomo. Puso un ejemplo: "Para la vigilancia de las 170.000 o 180.000 máquinas tragaperrras de la región nos quieren dar sólo dos funcionarios".El ministro admitió en el asunto de la corresponsabilidad fiscal que la Comunidad de Madrid siempre había demostrado una posición clara y favorable, pero reconoció que Leguina le había planteado en la entrevistaalgunas reivindicaciones pendientes con el Gobierno central. Saavedra se marchó de la sede del Gobierno regional, en la Puerta del Sol, con un memorándum de esos asuntos paralizados para abordarlo con otros compañeros del Ejecutivo. Leguina ha entregado este documento a otros ministros y se lo ha enviado también a Felipe González, al que además pretende comentárselo en una entrevista personal.

Leguina precisó a continuación el contenido de algunas de estas reclamaciones, algunas de proyección histórica. La que más preocupa al Ejecutivo madrileño tiene que ver con el convenio que el Ministerio de Economía debe renovar antes del 31 de diciembre para la subvención de los viajes que se hacen en Madrid en metro o autobús. También quiere negociar las deudas pendientes en Sanidad y la utilización de los suelos en desuso en Madrid de organismos del Estado, como el Ministerio de Defensa o Renfe. El presidente regional señaló ayer que nadie le ha contestado todavía a estos requerimientos.