Hamás mata a un teniente coronel israelí en Gaza

Fue una emboscada planeada con espectacular precisión. Un comando palestino del grupo integrista Hamás esperó el viernes pacientemente en una esquina de Gaza a que pasara el vehículo del jefe de las Unidades Especiales del Ejército israelí en la zona. Abrieron fuego. El teniente coronel Méir Mintz, de 36 años, murió en el acto. Otros dos soldados resultaron heridos. Mientras, la solución de la guerra de las banderas hizo que Belén celebrara ayer la Navidad con una alegría desconocida desde 1987, cuando estalló la sublevación palestina contra la ocupación israelí.

El ataque del viernes fue una de las más audaces operaciones guerrilleras en Gaza en los últimos meses y coincidió con las expresiones de esperanzas de paz tan típicas de la Navidad. Méir Mintz es el militar de más alta graduación asesinado por Hamás desde que este grupo integrista comenzara sus actividades terroristas en 1987.El Gobierno de Israel declaró que este atentado no quedará impune. Simón Peres, el ministro israelí de Exteriores y arquitecto del proyecto de paz con la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), afirmó: "No hay compromiso posible con el Hamás".

En Belén, el patriarca cristiano Michel Sabbáh dedicó la homilía de la Misa de Gallo, celebrada en la iglesia erigida en el pesebre donde nació Jesús, al tema más candente en Oriente Próximo: las ilusiones e incertidumbres generadas por el acuerdo de paz entre Israel y la OLP. "Vivimos en tiempos difíciles, en un periodo transitorio", dijo.

Buenas intenciones

Refiriéndose al acuerdo firmado en septiembre, habló de "buenas intenciones" de los líderes políticos, "que aún buscan maneras de definir lo que es legítimo y transformar las buenas intenciones en acciones concretas".Monseñor Sabbáh, que es palestino, abogó con vehemencia en favor de los millares de prisioneros políticos palestinos que, a pesar de las conversaciones de paz, todavía languidecen en cárceles israelíes. "En nuestra vida diaria nada ha cambiado", dijo. Con todo, el mensaje final fue de firme esperanza: "Pedimos a Dios que inspire paz en nuestros corazones".

De hecho, el ambiente de las calles de Belén pareció dar sentido a ese deseo. Tras la controversia desatada por la prohibición israelí a que ondeara la bandera palestina en el municipio de Belén, el Gobierno de Isaac Rabin se dió cuenta de los peligrosos límites de la imprudencia y optó por acceder a los deseos de los palestinos. La Navidad fue celebrada con una algarabía que no se había visto desde 1987, el año que estalló la cruenta rebelión contra la ocupación israelí. En la Plaza del Pesebre volaron al viento nocturno las banderas palestinas y las voces de siete coros extranjeros que entonaban himnos de paz y reconciliación.

Los verdaderos efectos de estos deseos comenzarán a medirse en los próximos días. Para empezar, Yasir Arafat proyecta viajar hoy a El Cairo para consultas con el Gobierno egipcio, que está actuando de anfitrión de las conversaciones de paz entre Israel y la OLP. Mañana, los negociadores de ambos lados se reunirán en la capital egipcia para tratar de infundir vida al proyecto de paz.

En el campo palestino anoche había optimismo. Faisal Al-Husseini declaró en Amán (Jordania) que era razonable pensar en que en las próximas horas podrían solucionarse las cuestiones más espinosas: el control de las fronteras entre Gaza y Egipto. y entre Jericó y Jordania, por un lado, y la extensión territorial de la jurisdicción autonóma palestina en el oasis de Jericó. "Creo que las cuestiones más delicadas serán resueltas el domingo. Creo que ambos lados han logrado acuerdos, aunque no sé si en todos los campos", dijo Husseini.

Inevitablemente, la emboscada del viernes va a añadir un nuevo punto a la agenda de las negociaciones. Los israelíes quisieran que la OLP se hiciera cargo de Gaza cuanto antes porque sus temores más oscuros se están materializando: La franja ocupada se está convirtiendo en un pantano.

Falsa tregua

El Hamás había lanzado hace días nuevas advertencias de que su lucha contra el Ejército de ocupación es a muerte. Un panfleto que circuló a comienzos de semana y que ofrecía una tregua a Israel, fue calificado de apócrifo por un portavoz del movimiento en Ammán. "Esos informes son totalmente falsos", dijo Mohammed Nazal en la capital jordana. "Nuestra posición es clara: Continuaremos resistiendo la ocupación hasta que se vayan de nuestra tierra", agregó.La emboscada se produjo en momentos en que la oposición israelí está intensificando su campaña contra el Gobierno del primer ministro Isaac Rabin y el acuerdo de paz logrado con la OLP en septiembre pasado. Hace pocos días, guerrilleros palestinos mataron a dos israelíes en las afueras del pueblo Cisjordano de Ramalá, provocando represalias instantáneas de parte de furibundos colonos judíos.