`Tragaentrenadores` Gil bate récords

Jesús Gil presentó en sociedad a Jorge D'Aessandro, sexto de los entrenadores que se sientan en el banquillo del Atlético en la presente temporada. Seis técnicos es todo un récord en el fútbol español, aunque tanto la Federación como la Liga Profesional matizan que no hay estadísticas del todo exactas. La fama de tragaentrenadores, como le apodan a Gil en Italia, sigue su curso. No haymayor novedad que la del objetivo: no es ganar la Liga, sino salvar al Atlético. Durante el pasado fin de semana, padre e hijo [Miguel Ángel Gil] tuvieron en cartera entrenadores distintos. Se impuso el criterio paterno.

A falta de nueve jornadas para la conclusión de la Liga, el Atlético se encuentra en zona de promoción y a un solo punto del descenso directo. La derrota ante el Zaragoza (0-4) provocó la pérdida de confianza en Iselín Santos Ovejero y su relevo, como antes ya le sucediera esta misma temporada a Jair Pereira, Cacho Heredia, Emilio Cruz y José Luis Romero. Jorge D'Alessandro, el nuevo entrenador, llega al club con el único objetivo de colocarlo "en la plaza dieciseis", la que le garantiza la permanencia. "Teníamos que adoptar una solución de emergencia porque si no nos íbamos a la fase terminal", se justificó ayer Gil. Dotar de alegría al equipo y poner orden táctico fueron las promesas lanzadas por el nuevo técnico en su primer día de trabajo.Los jugadores del Atlético amanecieron ayer con un nuevo jefe al que obedecer. El sexto de la temporada, según todos los indicios; el segundo, según Gil: "Esta temporada ha sido Jair Pereira y ahora Jorge D'Alessandro. Los demás no cuentan: Eran técnicos de la casa". Entre la plantilla hubo sorpresa por el nuevo cambio, pero tampoco le dieron más vueltas. La situación es demasiado crítica como para detenerse a pensar en la conveniencia o no de otro entrenador.

"El problema no es el entrenador", comentó Caminero, "sirio sacar esto adelante como sea. Quedan nueve finales y hay que salir de donde estamos. Los que ganamos o perdemos los partidos somos los jugadores. El equipo no funciona. Es una cuestión psicológica". No cuestionan ni aplauden el relevo. Simplemente, asumen que la salvación del equipo es una cuestión que depende exclusivamente de su actitud en el terreno de juego.

D'Alessandro llegó a un acuerdo con Gil sobre su contrato de nueve partidos y, luego, ambos dialogaron con los jugadores. El presidente les volvió a recordar sus intenciones de involucrar económicamente a la plantilla si el equipo desciende. "La nave se hunde", explicó Gil, "y ellos también corren un riesgo. La ruina de la entidad nos afecta a todos. Les he dicho también que cualquier tema personal de cada uno lo afronten al final de temporada, pero que ahora se centren en salvar al Atlético".Contradictorio

Gil jugó con frases contradictorias cuando se le preguntó por el futuro de la entidad y el suyo si el' equipo finalmente desciende de categoría. "¿Qué voy a hacer yo en Segunda", afirmó. "Aunque sería un cobarde si abandonara al Atlético en los momentos difíciles", suavizó después. E insistió: "El club no desaparecerá mientras esté yo aquí, pero yo no quiero ir a Segunda".

Con todo, antes de plantearse lo que hacer la próxima temporada, Gil se centra en el presente. "Soy muy realista", dijo, "y he visto que el equipo no reacciona. Negarme a pensar que el Atlético se puede ir abajo es una frivolidad. Por eso, me atengo a los hechos y éstos me dicen que había que buscar un remedio con tal de superar la caótica situación en la que estamos. No eludo mi parte de responsabilidad. A lo mejor he vendido el Milan y no lo éramos. Nos equivocamos todos. Pero en Bosnia están peor. El que no se equivoca es que ya está en la tumba".

Jorge D'Alessandro apuntó las posibles soluciones que tiene el equipo: "La situación es tremendamente difícil. Lo importante ahora es tener fe, apretarse el cinturón y recuperar el norte. Pero esto va a ser simplemente lo que los jugadores quieran. Dar un diagnóstico de lo que sucede es imposible. Yo lo que intentaré es dar alegría al equipo. Cuando no llegan los resultados la gente se pone triste. Por eso, voy a intentar que reaccionen".

El nuevo técnico no tiene tiempo para implantar una revolución táctica. "Simplemente", dijo, "voy a tratar de poner un orden dentro de una dinámica de juego. No se puede hacer muchos cambios. Trataré de darles soluciones para que vuelvan a jugar como saben".

El equipo técnico que colaboró con Ovejero se mantendrá con D'Alessandro. Es decir, Carlos Aguiar será su segundo y José Ángel García, el preparador físico. Ambos llegaron al club con Emilio Cruz.