Ramallo pide que el Congreso defienda su dignidad tras los ataques de Almunia
Luis Ramallo, diputado del PP, miembro de la Mesa del Congreso y vicepresidente cuarto de la Cámara, sorprendió ayer a sus compañeros en el órgano de dirección de la Cámara alta al pedir que la Mesa se manifestase expresamente sobre su dignidad para ocupar la vicepresidencia.Ramallo pretendía tal pronunciamiento tras las declaraciones del portavoz del Grupo Socialista, Joaquín, Almunia, que la semana pasada le acusó de indignidad al atribuirle filtraciones de la comisión Roldán, de la que Ramallo es miembro, y que tiene carácter secreto. Según fuentes de la Mesa, el problema se zanjó cuando el presidente de la Cámara, Félix Pons, sugirió que el asunto no estaba en el orden del día ni existía ninguna previsión de tratarlo.
Por otra parte, la Mesa del Congreso solicitará un informe jurídico a la Secretaría General para decidir si entrega la transcripción de sus declaraciones ante la comisión Roldán a Carlos de la Torre, jefe del gabinete técnico de la Guardia Civil, y a Antonio Pinal, consejero delegado de la constructora Brues. Ambos comparecientes solicitaron las cintas con sus declaraciones ante la comisión porque entendían que las informaciones recogidas en diversos medios de comunicación no responden a la realidad de lo que manifestaron ante los diputados. El problema se plan tea por el carácter secreto de la comisión.
Sin embargo, la Mesa se planteó la necesidad de no dejar indefensos a ciudadanos que se sientan agredidos en sus derechos a partir de una comparecencia ante la Cámara. De la Torre, que fue jefe del gabinete técnico con Roldán negó, en su día, haber declarado que aquél se reunía frecuentemente con el vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra. Pinal niega haber afirmado que directivos de su empresa, a la que se adjudicaron numerosas e importantes obras de la Guardia Civil, sean miembros relevantes de HB.
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