Arzalluz ve riesgo de enfrentamiento civil en Euskadi

El Partido Nacionalista Vasco (PNV) ve cómo la llama del enfrentamiento civil crece sin parar y puede acabar incendiando Euskadi. En esa escalada de enfrentamiento entre ETA y su entorno, y el PNV y la Ertzaintza (policía vasca), la formación de Xabier Arzalluz teme verse desbordada y que personas "ajenas a la disciplina" del partido decidan acabar con la "impunidad y chulería" de la izquierda abertzale radical. La dirección peneuvista entiende que las últimas declaraciones de líderes de HB y KAS tras la desarticulación del comando Vizcaya son una sentencia de muerte, y así lo plantea en un duro comunicado dirigido a KAS leído ayer por Arzalluz: "Entendemos perfectamente la amenaza directa contra nuestras vidas".

La falla abierta entre ETA-KAS y el PNV ha llegado a un punto sin retorno. Primero fue el asesinato del sargento mayor Joseba Goikoetxea, que fue respondido por la ejecutiva nacionalista con un punto y final en las relaciones con ese mundo. Ahora, los seis intentos de atentado del desmantelado comando Vizcaya contra el consejero de Interior, Juan María Atutxa, y las andanadas verbales de dirigentes como Xabier Alegría y Floren Aoiz. Hace un año, el asesinato de Goikoetxea empujó a las juventudes del PNV a llamar a la autodefensa contra las "agresiones fascistas" de la izquierda abertzale. Ayer, Arzalluz mostró su temor de que todo esto pueda desembocar en el enfrentamiento civil que "ellos ya han comenzado".Flanqueado por los máximos responsables de su formación en el País Vasco y Navarra, el presidente del PNV lanzó un aviso a los radicales que se empeñan en avivar la marea del enfrentamiento entre vascos. En un durísimo comunicado dirigido a KAS, se indica: "Midan estos señores, no sea que gentes vascas ajenas a la disciplina del EAJ-PNV tomen en serio sus palabras y decidan también acabar con la impunidad y la chulería de quienes matan, secuestran, extorsionan, agreden, queman coches de ertzainas, destrozan autobuses, trenes o comercios, pintan paredes, insultan, calumnian y mienten, y lleguemos así a lo que ellos han comenzado hace tiempo y llaman enfrentamiento civil".

La orden de la dirección de ETA de atentar contra Atutxa ha puesto al PNV a un paso del precipicio. Aunque Arzalluz intentó apaciguar los ánimos y aseguro que su partido nunca se tomará la justicia por su mano, no ocultó que algunos militantes se le acercan y le dicen al oído que "esto se tiene que acabar".

El líder del PNV, con un discurso de contención, advertía sobre la respuesta a los intentos de asesinato a un político del prestigio de Atutxa. "¡Verá usted la reacción que va a haber cuando se enteren [los militantes del PNV] que iban a por Atutxa!", dijo.

Atutxa comparecerá hoy en la Diputación Permanente del Parlamento vasco para explicar la operación de desarticulación del comando Vizcaya, que siguió en la madrugada de ayer con el registro de la sede vizcaína de KAS. La operación, ordenada por la Audiencia Nacional, está relacionada con la detención del liberado (a sueldo) de KAS Joseba Enbeita Ortuondo, Gorri.

Arzalluz es consciente de que Goikoetxea fue asesinado hace un ano porque "no podían ir contra Atutxa", pero toda la dirección del PNV entiende ya que las palabras de los dirigentes de KAS son algo más que pura retórica: "Las amenazas van contra nuestras vidas". "Antes nos mataban los fascistas, ahora no tenemos nada claro si nos apunta la pistola del abertzale o del leninista antisistema".

Arzalluz ve al autodenominado Movimiento de Liberación Nacional Vasco sumido en una "gigantesca lucha por el poder". En esa pugna destacaría el núcleo de dirigentes de KAS que intentan presentar su proyecto como el "único existente".

HB siguió intentó concentrar ayer a sus militantes ante las comisarías de la Ertzaintza para protestar por el "hostigamiento a la izquierda abertzale", pero su capacidad de convocatoria fue mínima. Sólo unos centenares de personas acudieron a la protesta en todo Euskadi.