Jáuregui considera "una ofensa" que se le relacione con la trama
El secretario general del PSE-EE, Ramón Jáuregui, delegado del Gobierno en el País Vasco cuando Julián Sancristóbal era director de la Seguridad del Estado, se mostró ayer visiblemente ofendido y preocupado por el poso que puedan dejar para su persona en la escena política las últimas detenciones relacionadas con los GAL. "Cualquier alusión a mi persona en ese sentido lo considero una ofensa", advirtió en declaraciones a la SER.La vinculación de Jáuregui con esta trama terrorista se circunscribe únicamente -según los datos conocidos hasta el momento- al cargo que des empeñaba mientras Sancristóbal y el resto de los policías de tenidos organizaban los GAL, según la acusación hecha ante el juez Garzón por los ex policías Amedo y Domínguez.
Recién salido de la negociación para formar Gobierno en el País Vasco (la reunión se prolongó más allá de las dos de la madrugada), Jáuregui durmió poco más de tres horas y se levantó con su trayectoria política cuestionada de refilón por un asunto tan turbio como el de los GAL. A su juicio, las actividades de Sancristóbal no transgredieron ni la barrera de la legalidad ni los comportamientos democráticos, aunque considera un grave error la creación de este grupo terrorista.
El dirigente socialista contextualizó ante los micrófonos radiofónicos la aparición de los terroristas anti ETA. "Había ciento y pico muertos todos los años, teníamos un país al lado [Francia] que dejaba pasar a los terroristas como les daba la gana, para que volvieran, vinieran, mataran, se marcharan y se protegieran, y una sociedad vasca que daba prácticamente la espalda a la reacción contra ETA. Había solamente una línea de frente contra todo eso".
El lunes, cuando Garzón encarceló a Sancristóbal, Jáuregui manifestó: "Tengo una sorpresa grande, una gran perplejidad por la información. Yo personalmente puedo decirles que estas personas [los arrestados] han sido responsables de la lucha policial contra ETA y que en mi opinión han prestado servicios importantísimos en la lucha contra el terrorismo. Esto me parece evidente decirlo".
Este reconocimiento a los servicios prestados venía recubierto, precisó, por el manto de la legalidad y del respeto al Estado de Derecho, como reiteró ayer. "Yo estoy covencido de que siempre lo han hecho en el marco del Estado de Derecho y de la legalidad, y espero que así quede claro y demostrado".
Ramón Jáuregui estuvo al frente de la Delegación del Gobierno en el País Vasco desde el 4 de enero de 1983 hasta el 13 de marzo de 1987, fecha en la que fue sustituido por Julen Elgorriaga. ETA estaba en pleno acoso, terrorista y los atentados de los GAL se sucedieron durante todos los años en que Jáuregui permaneció al frente de la delegación.
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