El argelino detenido en Barcelona pretendía entregar armas a un terrorista islámico
La policía reveló ayer la verdadera identidad del hombre que fue arrestado en Barcelona el pasado sábado, presuntamente relacionado con el terrorismo islámico y con un arsenal de armas en su maleta. El detenido, que viajaba con pasaporte francés falso a nombre de Frederick Dominique Lucien Bretaul, es en realidad el argelino Ghebrid Massaoud, de 25 años, vinculado al Grupo Islámico Armado (GIA), una facción radical desgajada del Frente Islámico de Salvación (FIS).Massaoud pasó ayer a disposición del juzgado de Instrucción Central número 2 de la Audiencia Nacional, cuyo titular, Ismael Moreno, decretó su ingreso en prisión por un delito de depósito de armas de guerra.
Según fuentes policiales, el argelino se encontraba en Barcelona desde el pasado día 4 y fue seguido en todo momento por agentes de la Unidad Central de Información Exterior, apoyados por funcionarios de la Unidad Territorial Antiterrorista (UTA) de Barcelona.
Massaoud se hospedó en el modesto hostal El Abrevadero, en la calle de Vilá Vilá (Barcelona), a la espera de contactar con otro compañero de la organización al que debía hacerle entrega de las armas que portaba y que iban destinadas a Argel. Al fallarle el contacto, el presunto terrorista adquirió un billete de autobús de regreso hacia París y fue detenido por la policía, en la tarde del pasado sábado, en la estación de Sants.
En el momento de la detención, Massaoud llevaba en dos bolsas de viaje tres subfusiles automáticos tipo MP-40, de fabricación checa, con sus respectivos cargadores; otros dos cargadores para el fusil de asalto Kalashnikov, casi 2.000 cartuchos de diverso calibre y una granada de mano de la llamadas de piña.
Llevaba también un cartucho de trilita, un detonador eléctrico, dos miras miniláser de precisión, un silenciador, una tarjeta de crédito falsa y un ejemplar del Corán. Las armas habían sido adquiridas en países del Este de Europa, presumiblemente en el mercado negro.
La policía española dispuso de 48 horas para interrogar al detenido hasta que se difundió la noticia de su detención. Durante todo este tiempo los agentes estuvieron en contacto con policías franceses que habían puesto en marcha una operación para desarticular a otros comandos.
Sin infraestructuraSegún fuentes de la investigacion, el presunto terrorista negó cualquier tipo de vinculación con grupos islámicos, aunque admitió sentir simpatía por ellos. "Sus declaraciones fueron inconexas", manifestaron las mismas fuentes.
La policía considera que Massaoud carecía de infraestructura en Barcelona, aunque en los últimos días ha sometido a seguimiento a algunos inmigrantes argelinos por si tenían alguna relación con el transportista de armas. Por el momento, no se han producido más detenciones en España pero se ha redoblado la vigilancia en Barcelona, al ser considerada una ciudad clave en el paso de presuntos terroristas hacia Argelia.
El Gobierno francés solicitó hace medio año la colaboración del ministro de Justicia e Interior, Juan Alberto Belloch, ante la posibilidad de que activistas islámicos argelinos buscaran refugio en España ante la presión policial desatada contra ellos en Francia. Fuentes de Interior aseguran que "por el momento no se ha detectado la implantación" de células terroristas argelinas en España.
La gendarmería francesa solicitó a la policía española que mantuviera en secreto la detención de Massaoud para poder desencadenar otras varias operaciones contra grupos integristas que, posiblemente, no se circunscribirán a Francia.
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