Garzón rechaza los recursos y confirma la prisión de Vera, Sancristóbal y Planchuelo

El juez Baltasar Garzón ha rechazado todos los recursos de reforma presentados contra el auto de procesamiento en el sumario del caso GAL y ha confirmado la prisión incondicional para Rafael Vera, Julián Sancristóbal y Miguel Planchuelo, ex secretario de Estado para la Seguridad, ex director general de Seguridad y ex jefe superior de Policía de Bilbao, respectivamente. El juez también rechaza la "pertinaz afirmación" de que los ex policías José Amedo y Michel Domínguez estén recibiendo un "trato de fávor" por su parte.

"Poco ha de decirse" del recurso de Vera contra su procesamiento, escribe el juez Garzón, habida cuenta de que "no se aporta ningún dato o elemento nuevo que haga variar el criierio". El juez añade que los indicios que ha tenido en cuenta al procesarle "no han sido exclusivamente los que se apoyan en las declaraciones de los señores Amedo y Domínguez o sus esposas".Garzón mantiene en prisión incondicional a Vera ante la "extrema gravedad de los hechos" que le imputa. Suma su "gravedad objetiva e intrínseca", la alarma o repercusión social", "el deterioro que todo ello supone para la misma credibilidad de las instituciones en un Estado de Derecho", "la gravedad de las penas que puedan imponerse" y él temor a que Vera "se sustraiga a la acción de la Justicia".

El juez mantiene que ha fijado una fianza de 435 millones a Vera en concepto de responsabilidad civil teniendo en cuenta "exclusivamente el daño_producido" y a la vista "de la [responsabilidad civil] que pudiera exigirse en definitiva".

Garzón contesta más extensamente al recurso de Julián Sancristóbal, para rechazarlo con mayor rotundidad. El magistrado rechaza haber llevado el caso con "secretismo", como alega el abogado de Sancristóbal, José María Stampa, porque éste "no ha recurrido ni una sola resolución en la que se ha acordado la medida de secreto". Rechaza los demás alegatos porque son "impropíos", "vacíos de contenido jurídico", "poco verosímiles", y o "no merecen el mínimo comentario" o se basan "en un defectuoso conocimiento de la causa".

Según Garzón, el abogado incurre en el "error permanente de equiparar en todo a los señores Amedo y Domínguez" cuando éstos "están cumpliendo condena, y tienen concedido un permiso extraordinario. También rechaza que estén recibiendo un "trato de favor" cuando "están procesados por todos los hechos en los que han participado".

Al confirmar la prisión de Sancristóbal, Garzón afirma que éste "facilitaría mucho la labor del juzgado si libremente diera autorización expresa para que pudieran investigarse las supuestas cuentas bancarias de las que pueda disponer en Suiza", ya que mantiene que no dispone de más bienes que los inmuebles en España. La existencia de tales cuentas, dice, "está acreditada".

En respuesta a los restantes recursos, el juez pondera las declaraciones de las esposas de Amedo y Domínguez, en las que no aprecia "animadversión por los procesados", sino "firmeza, decisión y contundencia". Según Garzón, con sus declaraciones lo que hacen es descubrir elementos en su contra, que privan a sus maridos y les privan a ellas de más de 200 millones de pesetas, y todo ello de "forma voluntaria". "Por tanto, no es de recibo afirmar sin demostrar que les guía un interés espúreo, cuando libre y espontáneamente han facilitado la acción de la justicia", agrega el juez.

La resolución judicial no accede a revocar la libertad provisional bajo fianza del ex secretario general de los socialistas vizcaínos Ricardo García Damborenea, a quien tampoco se le rebajan los 25 millones de fianza.