Tormentas gemelas

Celta y Sevilla se enfrentan esta tarde en Balaídos con la imposibilidad de elevar uno de los más famosos refranes del fútbol a la categoría de certeza: "A entrenador nuevo, victoria segura". Los dos equipos estrenan estos días técnicos en la Liga. Fernando Castro Santos se sentará en el banquillo local y Juan Carlos Álvarez lo hará en el visitante. Es la última de una cadena de coincidencias, casi todas desagradables, que han marcado a estos dos clubes desde que el día 1 de agosto la Liga de Fútbol desencadenara la guerra del fútbol enviando a Celta y Sevilla a Segunda B.Todo encadena a estos conjuntos. Y es que el inicio liguero de Celta y Sevilla ha sido tan decepcionante como sorprendentemente paralelo. Una sola victoria alumbra el casillero que este apretadísimo campeonato ha convenido en dotar con tres puntos. Ambas fueron victorias agónicas, por la mínima, aunque la celtiña fue a domicilio (0-1 en Sálamanca). El único triunfo sevillista fue ante la Real (2-1), con un gol de Carlos en el último minuto.

Celta y Sevilla han caminado juntos desde la primera jornada. Sólo les separa un punto, y, desde la cuarta, apenas si se han distanciado en un puesto en la tabla de Primera. Han coincidido en número de puntos en cuatro de las ocho jornadas disputadas y comparten dos de los lugares que más queman: la zona de promoción y descenso.

En Sevilla ya se piensa en las meigas gallegas. El nuevo presidente Francisco Escobar, preguntó, mientras observaba el primer entrenamiento que dirigía Juan Carlos Álvarez, sólo media hora después de destituir a Toni Oliveira: "¿Cómo va el Celta de Vigo?". A esa hora ya perdía 1-0 en El Molinón, resultado inamovible a la postre. Un día antes también cayó el Sevilla (0-3) ante el EspanyoI. Las apuestas señalan para esta tarde un 0-0.