Concentracion de 50.000 canadienses contra la separación de Quebec

ENVIADO ESPECIAL, Alrededor de 50.000 personas se concentraron al mediodía de ayer en una céntrica plaza de Montreal para manifestarse en contra de una eventual separación de Quebec de Canadá y en apoyo del Movimiento del No en el referéndum que la provincia oriental canadiense celebrará el próximo lunes. Habitantes de diversas provincias, especialmente de la fronteriza Ontario, llegaron a la ciudad en aviones, trenes y autobuses fletados por empresas simpatizantes con la causa del no y organizaciones afines al gobernante Partido Liberal

"Un gran grito del corazón", titulaba ayer el diario en lengua francesa La Presse, contrario al secesionismo. "Un cariño muy sospechoso. Un camelo", definía la concentración Jacques Bouchard, líder del Bloque Quebqués e impulsor del Movimiento del Sí.Los organizadores del mitin, oficialmente la Confederación de Empresas de Quebec, aseguraban la víspera que entre 100.000 y 150.000 personas participarían en la manifestación de la plaza de Canadá, lo que significaría la mayor concentración popular en la historia electoral del país. Sin embargo, las cifras reales, según estimaciones de la policía, fueron inferiores y se quedaron en tomo a los 50.000, según estimaciones de la policía.

En el mitin intervinieron el primer ministro federal, Jean Chrétien, y el jefe del Movimiento del No y líder del Partido Liberal de Quebec, Daniel Johnson. "Tenemos un gran país. Quebec ha participado en su construcción, y estoy seguro de que continuará haciéndolo", afirmó Chrétien, que intercalaba el francés con el inglés. Su breve discurso era interrumpido con gritos de "¡Canadá!, ¡Canadá!".

Brian Tobin, el vehemente ministro federal de Pesca, estuvo presente en la cita de ayer y dijo que el encuentro había tenido un carácter "espontáneo". El protagonista de la guerra del fletán fue uno de los principales inspiradores del mitin de Montreal. Conscientes de la probabilidad cada vez más real de una derrota federalista en el plebiscito del lunes, destacados dirigentes del Partido Liberal convencieron a Chrétien esta. semana para quemar todos los cartuchos y persuadir al resto de las provincias de la Federación Canadiense a intervenir directamente en la campaña de Quebec, "Vamos a Montreal como centinelas silenciosos de la pasión que tenemos por este país y por un Canadá unido", declaró la víspera el popular ministro.

El director general del comité electoral nacionalista ha advertido que, posiblemente, serán sancionadas aquellas empresas que han financiado directamente la concentración. Compañías como Air Canada hicieron rebajas en sus tarifas de hasta un 90% en sus vuelos con Montreal, al igual que la compañía ferroviaria Via Rail. Muchas empresas de Ontario dieron a sus empleados una jornada de asueto pagado y les facilitaron el viaje gratis a Montreal, la capital industrial y económica de Quebec. The Toronto Star, el diario de mayor circulación nacional, reclutó una flotilla de casi medio centenar de autobuses para animar a muchas personas a desplazarse de Toronto a Montreal.

"Cariño sospechoso"

El líder del Bloque Quebequés, Lucien Bouchard, ironizó sobre esta respuesta masiva de cariño mostrada ayer por los habitantes de otras provincias. "Me parece que se trata de un cariño sospechoso, interesado, con descuentos de tarifa".

EL bando nacionalista tiene motivos para exultar optimismo. Las tres últimas encuestas publicadas entre ayer y anteayer le siguen colocando por delante de los federalistas. Estos, sin embargo, afirman que el auge secesionista se ha detenido y que el mitin de ayer tendrá un efecto importante. La ventaja del no, según las tres últimas encuestas, oscila entre uno y seis puntos. El porcentaje de indecisos se coloca entre el 13% y el 16%.