Nueva Izquierda da por cerrada la crisis por la exclusión de Jerónimo Andreu

Nueva Izquierda dio ayer por cerrada la crisis abierta por la exclusión de Jerónimo Andreu como número uno en la candidatura de Cádiz de Izquierda Unida. El hecho de haber conseguido mantener a sus el candidatos en Valencia ha sido el factor determinante para echar por tierra sobre un asunto que había provocado graves tensiones en Izquierda Unida. Hasta de después de marzo, una vez que celebren las elecciones generales, Nueva Izquierda no volverá a tratar el tema de su papel dentro de IU. Ni tampoco si su presencia en la coalición cuenta con el respaldo y el respeto de las demás fuerzas.La corriente Nueva Izquierda ha decidido dar por válido acuerdo adoptado en su convención del pasado mes de diciembre sobre la pluralidad IU. Y aunque en fuentes de Nueva Izquierda había causa un profundo malestar la pérdida de dos de sus candidatos (Diego López Garrido en Madrid y Jerónimo Andreu en Cádiz) de puestos seguros en las listas al Parlamento, la reunión de ayer de la dirección de esta corriente prefirió, dar carpetazo, al menos de momento, no aceptar "críticamente la configuración de las candidaturas".

"Comunismo ultra"

No se han ahorrado, sin embargo, críticas a las presiones "del PCE más ortodoxo", al que culpan de "estar intentando convertir la riqueza y, pluralidad de IU en un partido comuinista ultraortodoxo, monolítico y trasnochado". Los dirigentes de Nueva Izquierda hicieron ayer un llamamiento hacia la unidad y a trabajar por conseguir que el conjunto de Izquierda Unida obtenga en los próximos comicios mejores resultados que en los anteriores. Queda, no obstante, la resaca de una crisis que posiblemente rebrotará tras elecciones.

En el consejo político de hoy de IU, Nueva Izquierda presentará enmiendas al texto elaborado por Anguita sobre el discurso político de la coalición. Son viejas críticas en torno a lo mismo la necesidad de que se defina el Partido Popular como el auténtico enemigo de la izquierda, sin que ello suponga abandonar las críticas lógicas a la acción de gobierno del PSOE.

En sus enmiendas, Nueva Izquierda advierte que lo relevante no es oponerse al neoliberalismo, "ya que se da por hecho que una fuerza de izquierda debe combatirlo", sino que hay que formar una base social progresista que debe ser catalizado por Izquierda Unida. Con ello se buscaría una mayoría de progreso que se enfrentara con efcacia a los conservadores.

En caso de no ser aceptadas las enmiendas al discurso político, la corriente mantendrá la abstención. No ocurrirá lo mismo con el programa electoral de Nueva Izquierda, aunque presente alguna enmienda, entiende que en líneas generales merece el apoyo y, en consecuencia dará su voto afirmativo.