La familia contraataca
Aquí, la que se lo ha montado bien es Penélope Cruz, que se ha ido a Cancún -a meditar con un walkman lleno de cantos tibetanos y un manual titulado Hacia la paz interior (lo saca en el Hola y me he quedado prácticamente ciega para descifrar el título), que lee y toma espirituales apuntes mientras se tuesta al sol. Todo lo demás es desasosiego.Por ejemplo, entramos en etapa de revelaciones. Felipe González eligió el mitin de Valencia, amenizado por la presencia de artistas, el pase del video de Banderas y la siempre estimulante actuación del rapsoda Cipriá Ciscar, para confiar a las masas que no nació el cinco de marzo como hasta ahora veníamos celebrando -yo, ese día particular, me pongo como loca-, sino el tres, porque su madre tardó dos (lías en registrarlo. No sabe el presidente cómo nos hermana este asunto, ya que servidora, que nací el 16-M, estoy inscrita el 30 porque mi padre no hizo la gestión hasta que despertó de la cogorza celebratoria. En fin. Lo bueno de este asunto es que, si se cumplen las encuestas, al menos tendrá González un motivo para tomarse un cava en familia. Aunque lo de que los psoatas tengan familia hay quien lo duda. Fíjense en lo que dijo el otro día en Narón, cerca de Ferrol, el número uno del PP por La Coruña, José María Hernáñdez Cochón: "Como los del PSOE son progresistas, lo primero que hacen es cargarse a la familia. La primera familia que se han cargado es la suya propia, que la han abandonado, han abandonado a los hijos, han abandonado a la mujer antigua y naturalmente se han buscado otra más joven, que ahora cuando pierdan los puestos que tienen, con los que han gana(lo mucho dinero, indudablemente los van a abandonar, porque ninguna mujer joven que se una a un viejo se une por razones de amor, sino por razones de interés". Y Fraga, que estaba presente, escuchó con Cara de dominó la sutil disertación de su correligionario secundario.
El señor Cochón hace gala de una percepción francamente extrasensorial al detectar y agrupar flaquezas humanas por colores políticos. Al menos tanta percepción como doña Isabel Preysler, mi ídola, quien -vuelvo al Hola- en una mundial entrevista, declara que ella ya sabía que su cónyuge, el señor Boyer, desde hace tiempo "se identificaba más ya con posiciones liberales que con las socialistas". No me diga.
Metidos en charchutería, me dicen que JASP -que me huele debe de ser algo reacio a leer frivolités, o sea. Julio Anguita Ascéticamente Precavido- sufrió un auténtico descoloque cuándo un periodista le preguntó qué pensaba sobre la polémica de Antonio Banderas y el jamón, y empezó a mirar a todas partes, desconcertado: %Un jamón de pata negra? Le juro- que no sé de qué estamos hablando".
De lo que estamos hablando, por ejemplo, es del sentido familiar del PP, que al parecer, más que de familia, es de clan, puesto que José María Aznar ha hecho contratar a su profesora de pádel, María Teresa Casado, paraque se integre dentro del personal auxiliar de uno de los dos gabinetes de prensa que preceden al líder carismático en su gira triunfal, y que llegan un día antes para que todo esté a punto, tanto para él y sus acompañantes cercanos, como para los periodistas que cubren la información. Digo yo que al candidato le debe de resultar de gran utilidad adicional, para asesorarle cuando se le acercan esas jovenzanas que se mueren porque él les firme las fundas.
De sus raquetas, naturalmente.
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