La CEOE reclama una nueva reforma laboral como la única vía para abaratar el despido
La CEOE, en su primer pronunciamiento tras las elecciones del pasado 3 de marzo, insiste, a través de una circular interna, en la necesidad de que el futuro Gobierno haga una reforma que permita abaratar el coste del despido. La patronal considera que ésta es la única vía para lograr este objetivo pues, en su opinión, es imposible establecer en los convenios colectivos una indemnización pactada de antemano, una medida que los empresarios catalanes intentan firmar con los sindicatos, pero que tiene difícil viabilidad legal. La CEOE declara que la única referencia válida para las subidas salariales de 1996 debe ser la inflación media de los países europeos más estables, es decir, un 1,9%.
Este es el primer mensaje que la CEOE lanza al futuro Gobierno. A través de una circular para la negociación colectiva elaborada con CEPYME y difundida ayer por Europa Press, la patronal mantiene las exigencias planteadas el pasado mes de enero -cuando aún se consideraba posible "la mayoría suficiente" del PP-, especialmente en lo que respecta a la necesidad de reducir el coste del despido. Para ello, cree que es esencial "instaurar otro marco regulador" porque en la actualidad "resulta imposible, desde el, punto de vista jurídico, regular en los convenios colectivos cuantías indemnizatorias para la extinción de contratos de trabajo inferiores a las reguladas por la ley". Los empresarios aspiran a reducir a la mitad los 45 días por año trabajado que cuesta de media el despido en España actualmente.Éste es el principal punto que la CEOE tiene intención de defender con vistas a la negociación colectiva. El mensaje va dirigido también a la patronal catalana, Fomento del Trabajo, que en sus negociaciones para alcanzar un pacto con los sindicatos ha incluido el concepto del "contrato estable", según el cual se establecería una indemnización por despido pactada de antemano en el marco de los convenios colectivos. Un punto, de dudosa viabilidad legal, sobre el que discrepan las centrales sindicales y que ha retrasado la firma del citado pacto.
Subida salarial del 1,9%En cuanto a las subidas salariales de este año, la patronal insta a los empresarios a tener como "única referencia válida" la inflación media de los tres países más estables de la Unión Europea, según sus previsiones para 1996. Esta referencia, la misma que usa el Tratado de Maastricht para el examen de convergencia, se sitúa en la actualidad en el 1,9%. Esta política salarial, que supone perder 1,6 puntos de poder adquisitivo, es "clave para la supervivencia de las empresas españolas", asegura. Además, señala que los incrementos salariales máximos -iguales a la inflación prevista para este año, es decir, 3,5%- deben pactarse sólo si incorporan mejoras en la productividad.En su opinión, es necesario aplicar una política salarial rigurosa, pues, de lo contrario, las consecuencias en el empleo "serán muy negativas, dada la difícil situación por la que atraviesan muchas empresas". La CEOE también recomienda no incluir en los convenios cláusulas de revisión salarial. La patronal critica que los negociadores empresariales limiten o incluso renuncien al uso de modalidades contractuales previstas en las disposiciones legales. Una práctica que, según la confederación, impide dar más flexibilidad a la empresa.
La CEOE también examina la propuesta de los sindicatos de reducir la jornada laboral. La patronal desaconseja rotundamente esta medida porque, en su opinión, conduce a incrementar los costes de las compañías, disminuye el crecimiento de la economía y deteriora la competitividad de las empresas.Negociación difícil
Este glosario de propuestas para la negociación colectiva choca casi punto por punto con las lanzadas a principios de mes por los sindicatos. En una propuesta unitaria, UGT y CC OO recomendaron a sus delegados que negociasen una reducción generalizada de la jornada laboral -el objetivo es llegar a 35 horas semanales en el 2000-. En ese documento, las centrales evitaron pronunciarse sobre el abaratamiento del despido. Hace un mes ya habían considerado que el mensaje que lanzó la CEOE en este sentido al PP era "una invitación al conflicto".
Los sindicatos están abiertos a la congelación salarial en los complementos de antigüedad, siempre que el ahorro se destinase a la creación de empleo. Y en cuanto a los incrementos salariales, piden una subida mayor a la inflación. Las centrales tienen previsto reunirse con la patronal cuando estén más avanzados los convenios.
Subida media del 3,9% en los convenios
Lejos del 1,9% de subida salarial que propone la CEOE, los convenios colectivos negociados en lo que va de año se han cerrado con un aumento salarial medio del 3,9%. Los aumentos negociados sí que coinciden, por tanto, con el objetivo de los sindicatos: respetar la moderación salarial, pero con incrementos superiores a la inflación prevista (3.5%) "para estimular el consumo y el empleo". Este 3,9% contrasta con el subida media del 3,7% con que se cerró el año pasado, lo que supuso una pérdida del poder adquisitivo pues el IPC acabó en el 4,3%. Esta pérdida fue mayor en 1994, pues con la misma inflación (4,3%) se pactaron subidas salariales del 3,5%.Los acuerdos alcanzados hasta ahora afectan a algo más de dos millones de trabajadores. Entre los convenios firmados destacan el de la banca, las cajas de ahorro y cajas rurales, donde se ha pactado una subida media del 3,16% para un total de 215.00 trabajadores. En el convenio de Telefónica, que afecta a 70.000 trabajadores, se acordó una subida salarial del 3,5% más una paga de productividad que eleva este incremento al 4,3%.
Los mayores aumentos para 1996 se han pactado en el sector de conservas vegetales (6,75%), autoescuelas (5,3%), conservas de pescado (4,8%), el metal de Vizcaya y Guipúzcoa (4,5,% y turrones (4,5%). Otros convenios importantes, como químicas y grandes almacenes, han firmado subidas del 4%, con una claúsula de garantía que obliga a una revisión a fin de año si el IPC se desvía del 3,5%.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.