Rubalcaba cree que Roldán comparece ante Móner con ánimo de venganza

Luis Roldán, ex director de la Guardia Civil, "intentará vengarse de quienes le llevaron a la cárcel" en su comparecencia ante el juez Eduardo Móner, prevista para el miércoles. Es la opinión del que fuera ministro socialista de la Presidencia Alfredo Pérez Rubalcaba, que rechaza una ley de punto final en el caso GAL. El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, que también se opone a esta ley, sugiere que el Parlamento reconozca que con los GAL se ha delinquido contra el Estado de derecho.

El ex ministro Rubalcaba calificó ayer de ingenuos a quienes crean que Luis Roldán pretende algo distinto a la venganza con su comparecencia voluntaria ante el juez del Tribunal Supremo Eduardo Móner. "Es un presunto delincuente que va a vengarse de aquellos que, cumpliendo con su obligación, le llevaron a prisión", dijo. El dirigente socialista, en declaraciones a Europa Press, hizo notar que en las nuevas denuncias "siempre están los mismos apellidos Roldán, Perote.... Personas que están implicadas en procesos judiciales".Sobre la posibilidad de una ley de punto final, Rubalcaba dijo que "eso es algo que sólo está en la mente de algunos defensores de quienes están montando este follón. Es un disparate, es anticonstitucional y el PSOE nunca lo va a apoyar".

El presidente del Partido Nacionalista Vasco, Xabier Arzalluz, también se confiesa contrario a que se aplique algo así al terrorismo de los GAL, y cree que es necesaria una conciencia colectiva de que ése no es el camino. El líder peneuvista solicitó ayer en una entrevista en Radio Nacional una declaración del Congreso de los Diputados reconociendo "que se ha delinquido contra el Estado de derecho". "Cuando hay una especie de defensa colectiva de este fe nómeno, entendemos que el Parlamento debe decir una palabra no tanto una petición de responsabilidades personales como una especie de reconocimiento de quienes representan al pueblo de que se ha delinquido contra el Estado de derecho. El Parlamento debe proclamarlo para que en lo sucesivo se eviten estos caminos", indicó. Añadió que no cree que el encarcelamiento del general Enrique Rodríguez Galindo sea un ataque a la Guardia Civil, y piensa que su traslado a prisión es una noticia triste en lo humano, pero buena en otros aspectos, porque demuestra que los controles funcionan. Para el presidente del PNV, lo peor es que alguien con autoridad sea capaz de violar la ley. "Lo que es realmente deporable es que un hombre constuituido en autoridad, y en autoridad para hacer guardar la ley, la viole de forma sistemática. Quienes consideran que llevar un tricornio es signo de impunidad, se marginan de la democracia y de los mínimos de un Estado de derecho. No tiene nada que ver con la Guardia Civil".

El secretario de los socialistas vizcaínos, Nicolás Redondo Terreros, culpó ayer a los "nacionalistas imprudentes" de dar alas a los radicales que practican la violencia callejera con declaraciones que terminan ayudando al fanatismo y la intolerancia.