Trovadores

Así como un montón de políticos españoles, protagonistas de la transición -e incluso actores secundarios- se pusieron las botas dando conferencias acerca de nuestro ejemplar pase a la democracia, en países necesitados de ella, en América Latina sobre todo, el futuro inminente ofrece al señor Aznar y sus mariachis una oportunidad de oro para ir a enseñarle a Benjamín Netanyahu cómo se puede cantar Las mañanitas con otra letra y otra música de la noche a la mañana, sin que por eso a uno le llamen cantamañanas en el festival de la OTI en donde suele reunirse el concierto de las naciones. Ello si es que a Bibi el amoroso le interesa propiamente que se crea que quiere seguir en el proceso de paz tal como era, y no tal como él y sus votantes lo conciben, en la versión a Jehová rogando y con el mazo dando.Netanyahu, a quien le conviene recordarle al amigo Clinton que él ya estuvo en la Conferencia de Madrid en calidad de portavoz del entonces Gobierno conservador de Isaac Shamir, tiene muchas posibilidades de convertirse en un cantautor evanescente de fuste. En la mencionada conferencia, estas orejitas que se han de comer los gusanitos le oyeron declamar ante la prensa que "Israel es sólo un pequeño país rodeado de enemigos y carente de Ejército" (cito de memoria, y Gumucio, nuestro corresponsal en Oriente Próximo, no me dejará mentir, porque recuerdo que nos miramos para ayudarnos a salir mutuamente del asombro). O sea, que el nuevo primer ministro de la tierra de leche y miel donde hay más gente especializada en repartir leches por metro cuadrado, posee genuinas cualidades de chansonnier.

Pero si no puede, si le puesta, si le duele, que tome ejemplo de nuestra Loyola, que ahí la tienen. Haciendo de tripas corazón y autorizando, sin rechistar, la exportación de semen de toro al continente desde el Reino Unido. Mi heroína.