_
_
_
_
POLÍTICA ECONÓMICA DEL PP

Ventas en cadena.

El proceso de enajenación de empresas ha sido continuo e ininterrumpido durante los últimos doce años

Aunque el Partido Popular (PP) ha hecho del plan de privatizaciones una de sus principales banderas electorales, lo cierto es que la venta de empresas al sector privado, así como las salidas a Bolsa, ha sido un proceso ininterrumpido desde el año 1985, (ver cuadro adjunto). El PSOE, durante la etapa en la que gobernó, ejecutó una política de privatizaciones de gran calado que admite ciertas comparaciones con el actual impulso que quiere dar el actual Gobierno.El Gobierno del PSOE, en la anterior legislatura que duró desde 1993 hasta el mes de marzo de 1996, privatizó empresas por valor de 1,12 billones de pesetas, incluyendo en esa cifra el tramo de Argentaria que decidió privatizar en los últimos meses de mandato.

Más información
El Gobierno pide a Venezuela otra extradición de un presunto terrorista

Sin embargo, en esa misma etapa el ministro de Economía, Pedro Soibes, paralizó tres importantes proyectos de privatización como fueron los de Aldeasa, Tabacalera y Trasmediterránea.

Los planes de privatización de Aldeasa se encontraban muy adelantados y el nuevo equipo de Gobierno se puede encontrar con terreno andado en este sentido. De hecho, Aldeasa puede ser una las primeras empresas en salir al mercado.

El PSOE sin grandes alharacas ha logrado poner en manos privadas empresas de gran dimensión como SFF, Seat, Entursa, Enasa, Enfersa, y parte de Argentaria, Ence, ENDESA y una gran parte de Repsol.

Una vez que se ha desatado el proceso privatizador falta por ver si al final será una realidad el manido tema de los núcleos duros (un grupo de accionistas aglutinan sus títulos y marcan la gestión). Hasta ahora se ha logrado formar estos núcleos en Telefónica (BBV, Argentaria y La Caixa) en ENDESA (]Banco Santander, Argentaria y BCH) y en Repsol (BBV y La Caixa). En España la privatización se! ha hecho básica mente de dos formas. Por un lado, la venta directa en su totalidad (caso de Seat) o en parte, y por otro con la colocación en Bolsa de paquetes de acciones.

Las privatizaciones han sido argumentadas con similares motivos por el anterior Gobierno y por el actual. Por una parte, se dice que tratan de responder al deseo de racionalización y reestructuración de sectores públicos que no tienen red comercial ni capacidad tecnológica para competir y cuya permanencia supone cargas injustificadas para el Estado. Por otra, se argumenta que son un mecanismo de obtención de recursos para reducir el déficit público.

El actual marco legal comunitario que exige la eliminación de los monopolios y las subvenciones a las empresas públicas, que quedó consagrado en Maastricht, es un detonante que impulsa las privatizaciones.

El Estado cuenta actualmente con unas acciones que valen en Bolsa 2,3 billones de pesetas. Éste es el valor de las participaciones que mantiene en un abanico de empresas tan diverso como ENDESA, Telefónica, Argentaria, Repsol, Tabacalera, Gas Natural, Trasmediterránea, Ence o Indra Sistemas.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_