Una nueva planta prevista en Vaflecas

Crecimiento obliga. La autorización para poner en pie los cinco nuevos barrios de Madrid, que cobijarán 70.000 viviendas, lleva aparejada la necesidad de construir una octava depuradora.Éste es uno de los ejes del segundo plan de saneamiento urbano, que ultiman los técnicos del Ayuntamiento antes de enviarlo al Gobierno municipal.La nueva estación de tratamiento de aguas residuales, llamada La Gavia, se instalará en un paraje deshabitado de Vallecas, según informan en el departamento de Saneamiento. Una vez construida, aliviará el trabajo de La China (trata una media de 3.300 litros por segundo) y Butarque (3.400).El presupuesto estimado para la construcción es de 4.500 millones de pesetas. Para financiarlo, el Ayuntamiento plantea pedir ayuda a la Unión Europea (UE) y a la Administración central.

Los expertos quieren que La Gavia sea una depuradora mejor que las ya existentes, capaz de eliminar el fósforo, fosfatos y el nitrógeno de las aguas residuales.

Las siete depuradoras madrileñas son de propiedad municipal, pero el Consistorio ha privatizado su gestión, que se adjudica mediante concurso. La mayoría de las concesiones están prorrogadas, para que la nueva licitación se celebre con el nuevo plan aprobado.

Para las empresas ofertantes, es un negocio apetitoso: se trata de ingresos fijos y una adjudicación en Madrid tiene efecto de escaparate a la hora de concurrir fuera.