Políticos e intelectuales agradecen a Ruiz-Giménez su contribucion a la instauración de la democracia

Una gran coalición de todas las tendencias del arco parlamentario, unas mil personas 525 adhesiones, celebró anoche en Madrid un homenaje a Joaquín Ruiz-Giménez, de 84 años, presidente de Unicef, por su contribución a la democracia en España con Cuadernos para el Diálogo. Acudieron al Palacio Municipal de Congresos de Madrid ante la convocatoria 34 años después de aquel octubre de 1963 en que nacieron "estos sencillos cuadernos", cuando todavía le quedaban al dictador 12 años de vida. Cuadernos para el Diálogo fue una cantera de políticos para la democracia.

Ruiz-Giménez, político procedente del franquismo, en el que llegó a ministro de Educación, era todavía consejero nacional del Movimiento cuando aparecio Cuadernos. La publicación de la encíclica Pacem in terris del Papa Juan XXIII dio el impuso decisivo a Ruiz-Giménez para fundar Cuadernos y crear así una platafórma de oposición al régimen y transición a la democracia. Así lo recordó anoche el abogado Jaime Miralles, uno de los desterrados a Fuerteventura tras el llamado contubernio de Múnich. Un detalle revelador del amplio espectro que se congregó en tomo a Ruiz-Giménez queda de manifiesto de forma palpable en el hecho de que el presidente de Galicia, Manuel Fraga, envió dos fólios con un texto de adhesión. El mismo Fraga que participaba en el Gobierno que desterró a Miralles a Fuerteventura por la reunión de demócratas en Múnich.Por unas horas, intelectuales, profesionales, políticos del Gobierno y de la oposición coincidieron anoche en el homenaje a Ruiz-Giménez: ministros como Rafael Arias Salgado, hombre de la primera hora de Cuadernos, y Jaime Mayor Oreja; el líder de la oposición Joaquín Almunia y bastantes ex ministros del PSOE. También acudió el líder de Izquierda Unida, Julio Anguita, y no faltaron los fundadores de CC OO, Marcelino Camacho y Julián Ariza; los obreros de Perkins, que participaron en Cuadernos desde sus inicios.

El director de la revista Pedro Altares recordó su trayectoria desde octubre de 1963 a octubre de 1978 y destacó que el semanario murió tras publicar una gran exclusiva: el borrador de la actual Constitución española. "Fue el canto del cisne de Cuadernos para el Diálogo", dijo Altares, quien afirmó: "Ruiz-Giménez no mira a la historia, sino que se incorpora a ella". También destacó Altares que más de 100 hombres procedentes de Cuadernos se presentaron a las primeras elecciones democráticas y casi todos salieron elegidos.

Presentó el homenaje el diputado del PP Javier- Rupérez, quien caracterizó a Ruiz-Giménez como "uno de los principales artífices del clima de reconciliación y diálogo para la recuperación del Estado de derecho en España". José María Riaza, uno de los hombres clave en el proyecto de Cuadernos para el Diálogo, anunció que se habían recibido 525 adhesiones, entre ellas la de José María Aznar, quien se excusó de no poder asistir por su viaje a Japón. También la Ejecutiva Federal del PSOE manifestó que " Cuadernos para el Diálogo fue una isla de libertad en los años en que la oscuridad imperaba en España".