Arzalluz reclama a Mayor Oreja que no hable de unidad mientras "desprecia" al Parlamento vasco

Bajo la lluvia y con la voz rota por la tos, el presidente del Partido Nacionalista Vasco (PNV), Xabier Arzalluz, exigió ayer al Gobierno que deje de apelar a la suma de esfuerzos frente a ETA mientras no cambie su actitud hacia sus reclusos. "Yo le tengo que decir a [Jaime] Mayor Oreja que mientras siga así, mientras desprecie de la manera que lo está haciendo al Parlamento vasco, que no hable de la unidad de los demócratas contra el terrorismo", enfatizó el líder nacionalista ayer en Sukarrieta,en los actos conmemorativos del 94º aniversario de la muerte del fundador del PNV, Sabino Arana.

A los peneuvistas no les ha gustado el trato recibido en Madrid por la Comisión de Derechos Humanos del Parlamento de Vitoria, que pide el acercamiento de todos los presos vascos a prisiones cercanas a Euskadi. Arzalluz explicó ayer a sus correligionarios en Sukarrieta, la pequeña localidad de la costa vizcaína donde está enterrado Arana, que su partido está " en absoluto desacuerdo con la política penitenciaria y antiterrorista del Gobierno". El presidente del PNV añadió una pizca de intriga a su, afirmación y les dijo a los cerca de un millar de militantes y simpatizantes que no era el momento para desglosar los motivos.Los peneuvistas consideran que la política auspiciada por el ministro del Interior está basada en la imposición. Según Arzalluz, Mayor pretende en materia antiterrorista "un contrato de adhesión a lo que él haga". El líder peneuvista, que momentos antes había elogiado el carácter pragmático de Arana, aseguró que había que buscar unas conclusiones en este aspecto "que no sean al 100 % de ellos ni de nosotros". "Esto es un trato político", subrayó.

A pesar de que Arzalluz prefirió no dar plazos al Gobierno sobre el reagrupamiento de los presos vascos, porque "suena a desafío", sí dejó caer que una fecha propicia podría ser Navidad o Fin de Año. Estas palabras recalcan la estrategia política del Partido Nacionalista Vasco al respecto, sugerida hace unos días por el responsable de Interior del Gobierno vasco, Juan María Atutxa.

Poco después de este acto, varios miles de personas atendían la convocatoria de Herri Batasuna para manifestarse en las tres capitales de la comunidad en contra de una posible condena del Tribunal Supremo a los 23 miembros de su Mesa Nacional. La marcha convocada en Pamplona había sido prohibida por la Delegación del Gobierno y las cerca de mil personas que se reunieron se disolvieron sin incidentes.

Encabezados por Tasio Erkizia y Karmelo Landa, los simpatizantes de HB que recorrieron la Gran Vía de Bilbao corearon consignas a favor de la independencia de Euskadi, la amnistía de los presos y vivas a ETA militar. Landa, luego, anunció la convocatoria de una huelga general en el País Vasco para el próximo 15 de diciembre si la Mesa Nacional del brazo político de ETA no es absuelta por el Tribunal Supremo.