Pugna entre Coca-Cola y Pepsi por el control de los locales de comida rápida

, La guerra comercial entre los principales fabricantes mundiales de refrescos llega de nuevo a los tribunales con la acusación más grave que se puede hacer sobre una empresa en Estados Unidos: Pepsico ha demandado a Coca-Cola por supuestos intentos de monopolizar ilegalmente este mercado. Un gigante acusa a otro de emplear prácticas comerciales prohibidas para hacerse con el control de las bebidas que se sirven en restaurantes y locales de comida rápida, lo que representa el 25% de las ventas totales de ambas compañías.El enfrentamiento entre Pepsico y Coca-Cola se centra ahora en el sector del mercado de mayor crecimiento: los millones de litros de refrescos de cola que no se venden en latas o en botellas sino que se sirven directamente en vasos.

Coca-Cola controla las dos terceras partes de ese mercado, frente a un escueto 22% en manos de Pepsico. En el texto de la demanda, los abogados de Pepsico aseguran que su rival está empleando una estrategia comercial en la que «usa su poder en el mercado para perpetuar su monopolio amenazando a los distribuidores con la prohibición de vender productos de Coca-Cola si facilitan a los clientes algún producto de Pepsico», una amenaza que según Pepsico han cumplido en muchas ocasiones. En la demanda también explican que Coca-Cola trata de asegurar el monopolio entre los distribuidores regalando productos adicionales (servilletas, vasos, tomate, mostaza, etcétera) si mantienen su fidelidad en exclusiva.

El vicepresidente de Coca-Cola, Randy Donaldson, ha negado las acusaciones y asegura que Pepsico actúa «movida por la desesperación: parece que Pepsico sólo desea competir con nosotros en los tribunales», dijo Donaldson. No se ha desvelado la cantidad que Pepsico solicita en los tribunales en concepto de indemnización.

Aunque Pepsi ha conseguido contratos importantes (entre otros, con las cadenas Hard Rock Café y Planet Hollywood), Coca-Cola sigue teniendo a su lado a los dos grandes: McDonald's y Burguer King.

No es ni mucho menos la primera vez que estas dos empresas llevan su lucha comercial a los tribunales. Sólo en los últimos dos meses Pepsico ha demandado a Coca-Cola para tratar de impedir que esta compañía compre la marca Orangina, y también presentó otra demanda en la India, uno de los mercados más importantes.