Una fundación iraní aumenta la recompensa por asesinar a Rushdie

La fundación iraní que promete una prima a quien mate al escritor angloindio Salman Rushdie ha aumentado en 300.000 dólares (unos 41 millones de pesetas) la recompensa por su cabeza. Con ello se ofrece ahora un total de 2,8 millones de dólares (unos 386 millones de pesetas) a quien cumpla la fatídica fatwa decretada en 1989 por el ayatolá Jomeini, que calificó de "blasfema" contra los principios del Islam la novela Los versos satánicos.El líder de la fundación religiosa 15 Jordad (15 de Junio), el ayatolá Hasan Sanei, afirmó: "No dejaremos que este asunto [el de Rushdie] caiga en el olvido", según citó su portavoz en declaraciones a un periódico iraní. "Es para nosotros un gran honor poder respaldar esta prima para ejecutar a Rushdie", añadió.

La fundación 15 Jordad está financiada con donaciones religiosas, aunque su jefe es nombrado directamente por el guía espiritual de la república islámica, el ayatolá Ali Jamenei, sucesor de Jomeini. La fundación se define como un "organismo oficial y revolucionario iraní".

Otro grupo fundamentalista, en este caso de estudiantes, ha ofrecido también la cantidad equivalente a 40 millones de pesetas a quien asesine a Salman Rushdie, según publicó ayer otro diario de Teherán.

El anuncio de un aumento en la recompensa por el cumplimiento de la fatwa surge después del acercamiento de posiciones respecto a este tema entre el Reino Unido y el Gobierno de Irán, el pasado 24 de septiembre. Tras una reunión que sostuvieron sus representantes en Nueva York, se decidió restablecer las relaciones diplomáticas entre ambos países, a nivel de embajador y no sólo de encargados de negocios, si el Gobierno de Teherán cedía en su apoyo oficial a la condena al escritor.

En ese momento el ministro de Exteriores iraní, Mohamed Jarrazi, declaró que su Gobierno "no tiene la intención de promover ninguna acción que atente contra la vida del autor de Los versos satánicos", y sostuvo que Teherán "se desmarca de todo tipo de recompensa que se haya ofrecido por cometer esta acción".

Las afirmaciones de Jarrazi desataron una viva polémica en Irán. En medios conservadores se reafirmó el carácter "irrevocable" de la fatwa decretada por Jomeini. Los musulmanes de izquierda moderada, partidarios del presidente Jatami, habían calificado el preacuerdo con el Reino Unido como una victoria de su política internacional. Pero los ultraconservadores han querido dejar claro que Rushdie, que vive oculto desde hace 10 años bajo protección de la policía británica, está aún lejos de poder sentirse a salvo y que no puede aún bajar la guardia.