Los pacifistas aseguran que un ejército profesional creará más gastos
"El cambio de la mili obligatoria a un ejército profesional se está realizando sin reducción destacada de efectivos militares del ejército español, sin un replanteamiento de la política de defensa y a través de un proceso de rearme desorbitado que dispara el gasto militar". Ésta es una de la conclusiones a las que se llegó en el Congreso Catalán por la Paz celebrado el pasado fin de semana en Barcelona y convocado por la Federación Catalana de ONG por la Paz (FCOP), que congrega a 19 organizaciones. Los ponentes coincidieron en criticar el nuevo papel que se le da a los ejércitos en Occidente, que " ha cambiado el mito de la defensa nacional por una imagen de misiones de pacificación; intervenciones que se podrían realizar con efectivos civiles más preparados para la paz". El profesor de la Universidad Autónoma de Madrid y ponente Carlos Taibo destacó la "excelente estrategia del Estado español al hacer ver que la función única de las fuerzas armadas es la de los cascos azules, lo que ha hecho subir la aceptación del ejército por parte de la opinión pública". A este respecto, Jordi Armadans, secretario de la FCOP, aseguró que "con la imagen de un ejército garante de la paz, sólo se cambia el discurso, pero no la perspectiva" y que "la creación de un ejército fuerte lo único que provoca es desconfianza en los países de su entorno". Los pacifistas reclamaron "un sistema de prevención de conflictos, en vez de instrumentos de gestión que sólo aparecen cuando se llega a la fase violenta" y la necesidad de "una educación por la paz, clave para fomentar la humanización social, potenciando con este fin personas capaces de nuevas formas de relación".
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