El Ayuntamiento de Valencia niega la validez del censo aprobado por el Gobierno Rechaza la reducción de más de 7.000 vecinos. El concejal Igual dice que el "doble empadronamiento" falsea las cifras
El Ayuntamiento de Valencia negó ayer la validez del censo aprobado el jueves por el Consejo de Ministros. "Hay una diferencia entre nuestros datos y los que dice la institución esa de Madrid [el Instituto Nacional de Estadística (INE)], no hemos bajado tantos habitantes como dicen", afirmó un portavoz municipal, Silvestre Senent. Según el INE, Valencia ha perdido en dos años 7.271 vecinos.
Senent, concejal y presidente del PP en la ciudad, esgrimió que había hablado con su compañero Vicente Igual, el edil de Administración General, responsable del padrón municipal, y éste le había ratificado que los datos del censo elaborado por el INE no coinciden con los que obran en poder de los técnicos municipales. "No se ha producido ese descenso de 13.000 habitantes que dicen desde Madrid", afirmó Senent. Las cifras del censo del INE, publicadas el viernes en el Boletín Oficial del Estado (BOE), recogen una disminución del 1% del número de habitantes de Valencia: de los 746.683 vecinos de 1996 a los 739.412 de 1998. Con esta reducción, Valencia se convierte en la segunda ciudad española que más población ha perdido en los últimos dos años, sólo por detrás de Málaga. El concejal ironizó sobre la "neura" de que Sevilla amenace con arrebatarle a Valencia la condición de tercera ciudad española más populosa. La capital andaluza, que ha pasado de 697.487 vecinos a 701.927 (un aumento del 0,84%) se encuentra, según los datos del INE, a 37.485 vecinos de la ciudad mediterránea. "La tercera capital es y seguirá siendo Valencia", ratificó Senent y bromeó sobre las iniciativas sevillanas para aumentar su población. No se trata de una cuestión simbólica ni de orgullo local: la distribución de fondos estatales y la importancia política de la ciudad dependen en buena parte de las oscilaciones demográficas. El concejal de Administración Pública del Ayuntamiento de Valencia, Vicente Igual, explicó ayer por la tarde los motivos por los que, a su entender, existe tanta disparidad entre las cifras municipales y las del Instituto Nacional de Estadística (INE) con respecto al número de habitantes de la ciudad. Vicente Igual detalla que el INE no ha contabilizado a aquellos ciudadanos que están censados al mismo tiempo en dos ayuntamientos distintos: la gente que se ha trasladado a vivir a la ciudad pero tiene un "doble empadronamiento" porque está inscrita en el padrón de Valencia y aún no ha sido borrada del listado de la población en la que residía anteriormente. Según los cálculos de Vicente Igual, responsable municipal del padrón, este doble empadronamiento falsea las cifras del censo de población del INE porque puede producirse una variación "de 3.000 a 5.000 habitantes" a favor de Valencia. El concejal de Administración General comenta que, anteriormente, para empadronar a una persona en la ciudad le reclamaban que presentara un documento en el que constara que había sido dada de baja del padrón del municipio en el que estaba inscrita anteriormente. "Sin embargo, ahora ya no es necesario darse de baja en la población de la que uno procede, porque el INE lleva el empadronamiento de toda España, cruza los datos y actualiza las cifras de todos los municipios españoles", apunta el edil. El concejal de Administración General achaca a este doble empadronamiento el descenso del 1% del número de habitantes de la la ciudad que recoge el censo del INE aprobado el pasado jueves por el Consejo de Ministros y publicado un día después en el BOE. Alegación al censo del INE Vicente Igual afirma que el Ayuntamiento de Valencia "ha presentado la alegación correspondiente" para que se revisen al alza las cifras del INE sobre la población de la ciudad. "Aunque tengan un doble empadronamiento el que vale es el último, el lugar en el que residen", añade el edil de Administración General. Mientras Valencia pierde habitantes (según el censo aprobado por el Consejo de Ministros), varias poblaciones metropolitanas como Torrent, Alboraia o Paiporta cuentan cada año con más vecinos que llegan, en buena parte, procedentes de Valencia. El encarecimiento de las viviendas en la capital y el deseo de residir en un lugar más tranquilo, lejos del caos urbano, son los principales motivos de la sangría demográfica que padece Valencia de forma constante, según los expertos. Por su parte, la población de la Comunidad Valenciana se ha incrementado ligeramente, en un 0,35%, al pasar de 4.009.329 a 4.023.441 habitantes. Alicante pierde 2.145 vecinos y se queda en 272.432, mientras Castellón recibe 2.012 nuevos ciudadanos y suma ya 137.741.
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